De todas las motocicletas que estaban convocadas para realizar su correspondiente Inspección Técnica del Vehículo (ITV), un 54,5% no acudieron a su cita, representando más de la mitad del parque de motos que figuraban en las listas para completar este trámite.
Lo preocupante de este asunto, lejos de que sólo un 45,5% de los convocados cumpliesen con su obligación, está en lo que sucedió con dichos conductores. De todas las motocicletas que comparecieron, un 17,1% no superaron la inspección a la primera, mientras que en el caso de los ciclomotores, este porcentaje aumentó hasta el 25,7%.
A tenor de estos resultados, lo más sensato es pensar que, aquellos que optan por no acudir a la ITV, tienen su motocicleta o su ciclomotor en peor estado que los que van y no la superan, haciendo que el panorama sea realmente preocupante.
Si seguimos investigando el informe de AECA–ITV, encontramos más datos que invitan al pesimismo. Por cada vehículo revisado, ya sea motocicleta o ciclomotor, se encuentran tres defectos graves de media, que suman un total de 297.613 defectos en todo 2013. Los campos más afectados fueron la iluminación, suspensiones, neumáticos y señalización.
En la misma línea, se identificaron un total de 169.681 defectos leves, que representaron un 15,8% más que en 2012. Los ciclomotores son el vehículo más conflictivo, ya que además de los defectos descritos, un 14% superaban la velocidad máxima de sus velocímetros cuando estos fueron homologados.
AECA–ITV quiere utilizar estos datos para concienciar a los usuarios sobre la importancia que tiene acudir a las revisiones reglamentarias de nuestra moto. Este organismo recuerda, además, que tras los peatones, los conductores de motos son el grupo más propenso a tener accidentes, ya que están implicados en un 22% de los mismos, con un 18% de fallecidos.
