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Cuando el enduro extremo se te va de las manos… y aparece un tren

Fotos: Youtube
Salir con los amigos a realizar una ruta de enduro puede ser una aventura divertida, una experiencia agradable aunque a veces se encuentren dificultades por el camino. Ahora, en todo grupo hay quien propone cosas más arriesgadas y la situación puede complicarse hasta tal punto que asusta.

Seguro que muchos amantes del enduro han pensado en alguna ocasión en probar el enduro extremo, un pensamiento que en las mayorías de los casos habrá desaparecido al empezar a ver imágenes de pruebas como la Hell’s Gate, Erzbergrodeo, Getzenrodeo y similares. Pero para otros, el jugar al límite siempre es una opción y si uno decide tomarla en solitario no hay problema, pero cuando tira de su grupo de amigos las cosas comienzan a ponerse “interesantes”.

Eso es lo que les pasó a un grupo de endureros en las cercanías de Melbourne, Australia, que estaban realizando una ruta apacible cuando, por un motivo que desconocemos, se toparon con una vía del tren en medio y ningún paso para poder cruzar al otro lado.

Son muchos los que en ese caso optan por mirar a un lado y al otro de la vía y si no viene nadie, a pesar de lo peligroso de la acción, se deciden a cruzar. Y esto fue lo que hicieron los protagonistas del vídeo. Con lo que no contaban es con que el tren estaba cerca y eso que se trata de una larga recta y, mucho menos, con que alguno de ellos se caería en las vías. Sólo los reflejos del piloto, desistiendo de rescatar su montura y saltando colina abajo, evitaron que sucediera una tragedia. Además, la fortuna estuvo del lado de los pasajeros ya que el tren no desacarriló y del resto de endureros pues la moto no salió despedida contra ellos. Así, se puede decir que a pesar de todo hubo un golpe de buena suerte.

Aunque parezca un obstáculo sencillo de superar, la zona de las vías de trenes se nivelan con grandes montones de piedra que simplemente está depositada, sin anclar, para intentar que haya los menores desniveles posibles a lo largo del camino. Por eso es fácil caerse al más mínimo fallo, ya que el suelo desaparece debajo de las ruedas literalmente. Que sirva de lección.

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