Aunque al parecer todavía no se ha tomado una decisión definitiva, si la marca italiana decidiera finalmente formalizar su inscripción en la nueva categoría Open (que sustituirá la próxima temporada a las efímeras CRT), el campeonato quedaría con sólo dos fabricantes (Honda y Yamaha) en la lucha por el título en su principal categoría, denominada Factory.
Recordemos que para los equipos inscritos en la categoría Open es obligatorio montar la centralita y el software de Magneti Marelli que facilitará Dorna como promotor del campeonato, aunque también ofrece mayores facilidades como son cuatro litros más de combustible por carrera, un mayor número de motores por temporada y un neumático trasero más blando (todavía por confirmar) que los equipos Factory.
Ahora se ha sabido por boca de Andrea Dovizioso que la marca italiana evaluará una y otra posibilidad durante le primer test del año en Sepang (Malasia). Según el propio piloto: «La decisión no se ha tomado aún. Después de probar las dos configuraciones tomaremos el camino definitivo». El piloto italiano también sugería que la aparente pérdida de rendimiento por el uso de una electrónica menos avanzada, podría verse compensado por otros apartados.
Esta conclusión ha ganado fuerza después de que el piloto colombiano Yonny Hernández probase por primera vez el pasado mes de noviembre en Jerez la configuración Open: «En Jerez las diferencias entre las configuraciones Factory y Open resultaban mínimas. También habría que averiguar cómo respondería el motor a esos cuatro litros de combustible adicionales. Debemos probar y ver si hay resultados positivos». En principio se había confirmado que sólo Hernández correría durante la temporada como Open.
Tanto Honda como Yamaha se han involucrado activamente en la nueva categoría Open, ya sea comercializando monturas completas como es el caso de la RCV 1000 R que pilotará Nicky Hayden en el equipo de Jorge Martínez “Aspar”, o de bastidores y propulsores en el caso del Forward Racing de Colin Edwards y el español Aleix Espargaró.
Sin embargo, las monturas de uno y otro fabricante conservan diferencias fundamentales respecto a sus monturas de fábrica. En el caso de Ducati participando en la categoría Open no sería así, ya que estaría en parrilla con motos prácticamente idénticas a lo que hasta ahora eran sus motos de fábrica.
Quizá Ducati haya barajado la categoría Open como una salida a una crisis que ya dura varias temporadas. La marca italiana no ha vencido una carrera desde la temporada 2010 y al estrepitoso fracaso de Valentino Rossi se ha unido el hecho de que durante la pasada temporada incluso la Aprilia ART de Espargaró (CRT) les puso en aprietos en algunas carreras.
Lo que es seguro es que la política de Ducati está resultando un enorme contraste con la de Honda, sin ir más lejos, que ha amenazado con abandonar el campeonato como ya hizo en 1967 si finalmente se impone la electrónica estándar para todas las motos en parrilla.
