Publicidad
[the_ad_placement id="adsense-mega-2-mobile"]

La pasión turca

Fotos: Kawasaki
No, hoy no toca ración de cine cochinete con Vicente Aranda y Ana Belén, ni trataré la novela de Don Antonio Gala, ni tampoco os convenceré de los beneficios del kebab un sábado loco a altas horas de la madrugada. La cuestión principal es la “ida de olla” del turco Kenan Sofuoglu (actual líder del mundial de Supersport) en la carrera de Motorland Aragón.

Hay que reconocer que ser el más malote de la parrilla sobre una moto de 140 CV y 161 kg a 250 km/h tiene su mérito. Otra cosa es volverte loco y que Dirección de Carrera te “castigue” penalizándote sólo con tres puestos tras haber hecho caso omiso a las advertencias de los comisarios (a cuatro vueltas del final, todo sea dicho) y hayas estado a punto de tirar a posta a otro piloto. Simon Buckmaster, mánager de la potente escuadra Honda PTR, no es uno de los que tienen a Sofuoglu en muy buena estima…

En la segunda carrera del año ya le descalificaron por hacer caso omiso a la sanción impuesta por Dirección de carrera al saltarse una chicane.

En una entrevista dijo “Racing is a big show” y la verdad es que, doy fe de ello. Lo que está claro es que ante acciones como esta (vídeo 0:38), unos tanto y otros tan poco. ¿Qué hubiese hecho Dorna si hubiese sucedido en Moto2? Posiblemente le hubiesen expulsado del campeonato, además del consabido destierro a una isla desierta sin alimentos y llena de hormigas asesinas, claro (¿A que sí Bautista?). Pero sin llegar a esos extremismos, ¿esto es de recibo? Infront Sports también se ha columpiado, porque una descalificación de carrera con advertencia para las siguientes hubiese sido lo más lógico.

Puedo entender que este año el equipo Kawasaki DeltaFin Lorenzini tenga que ganar el mundial de Supersport por cojones, tras 8 temporadas de aburrido dominio Honda y sin catar el 1 desde 2001. También asumo que el turco sea bicampeón del mundo de la especialidad (2007 y 2010 con Honda), que es el hombre récord de la categoría (19 victorias totales, 8 en una temporada y 44 podios) y que en Supersport no se andan con tonterías. Pero lo que no es de recibo es que intente tirar a todo un Fabien Foret (campeón del mundo en 2002 y 14 victorias en su palmarés) en plena recta y sin luchar el puesto, simplemente, porque se le han cruzado los cables con siete temporadas de SSP a sus espaldas.

La “efusividad” del de Kuzuluk ya la lió en 2011 cuando corrió el mundial de Moto2 en el equipo Technomag del malogrado Tomizawa y arrolló a Julito Simón destrozándole la pierna en el GP Cataluña. Casualmente, Julito no ha vuelto a ganar nada desde entonces… A su favor, el segundo puesto de Assen.

Que el pequeño de los Sofuoglu (27 años) sea un energúmeno y un barriobajero no quita que sea un fuera de serie sobre una 600. Su talento es indiscutible, pero su comportamiento es más que discutible. Quizá, parte de su actitud viene dada por un pasado familiar doloroso. Sus dos hermanos, también pilotos, se mataron en moto. Bahattin (campeón turco) en un accidente de tráfico en 2002 y Sinan entrenando en 2008. A su hermana la han pillado más de una vez circulando sin carné pero, sí, se salva todavía. ¿Le puede la rabia? ¿Necesita correr para aliviar lo que lleva dentro? ¿Una cuestión de honor en la familia? Quizá.

Gracias al concesionario/taller de su padre Irfan y a sus hermanos, Kenan se enganchó a las dos ruedas empezando a competir con 6 años, amasando un particular punto de vista de la competición: nunca celebra los triunfos con cava (lo aprendió de su hermano Bahattin que aludía su “musulmanidad” para no hacerlo), no tiene televisión en su autocaravana, es de los “molones” que viste una bota/guante de diferente color y luce el número 54 porque es el código con el que se identifican las matrículas de los coches de su provincia natal, Sakarya.

Kenan Sofuoglu lidera el mundial de supersport 2012

Relacionados

Lo último

Lo más leído