Publicidad
[the_ad_placement id="adsense-mega-2-mobile"]

Las mejores motos de la historia (IX): Yamaha RD350

Fotos: Yamaha
La década de los '80 marcó a muchos quemados por diversas razones. Al igual que el Renault 5 Copa Turbo, todos recordamos con entusiasmo a la "mata-pijos". Una de las motos de nuestra lista de “las 10 mejores” que he tenido la suerte de conocer bien personalmente.

Los años 70 son los años del triunfo de los motores de dos tiempos en el mundo de la competición. Yamaha y Suzuki fueron las dos marcas japonesas que antes se pasaron al sistema de motores “de agujeros” en sus motos grandes de carreras y este “paso” tuvo su pronto reflejo en las versiones de calle.

En 1972 es cuando aparece por primera vez el nombre RD. Quería decir, precisamente, Race Development (desarrollada en las carreras). Era una 250 de aire inspirada en las TZ 250/350 de la época, motos también míticas por lo que significaron para los pilotos privados de los ’70 y 80 en el mundial y en el resto de campeonatos hasta bien entrado este siglo. Por supuesto, en España, no conocimos aquella primitiva RD y para nosotros esas siglas siempre serán sinónimo de la última versión cuyo nombre completo es RD 350LC2 YPVS o RYZ (en USA, Australia y algunos otros países).

Esta RD 350 LC2 YPVS es la última evolución del concepto bicilíndrico paralelo de Yamaha empleado en una deportiva “pura”. Lo de LC2, como habrás “pillado” es por que era la segunda evolución de los motores de agua (Liquid Cooled) y lo de YPVS (Yamaha Power Valve System) hacia referencia a su sofisticado sistema de válvula parcializadora de escape, de gestión electrónica. Presentada en el salón de París de 1982, a España llegó oficialmente en 1985. Una moto muy rápida, una verdadera “caza-gigantes”, con un motor que rondaba los 60 CV para 140 kg, suficiente para batir en circuitos y carreteras a “4T´s” mucho mayores (y más caras). Eso, en un país con la tradición “dostiempera” que tenía el nuestro y un precio asequible la convirtió en una auténtica superventas en aquellos años 80.

Yamaha RD350LC carenada de mediados de los '80

Efectivamente, la RD 350 corría mucho*. Y era ligera. Pero precisamente por eso requería “saber” lo que te hacías sobre ella. El caso es que, como cualquier “japonesa” desarrollada en los 70, iba muy justita de parte ciclo. O quizá es mi apreciación, con ojos del siglo XXI, pero lo cierto es que creó una cierta leyenda negra: era la moto que compraban muchos “niños bien” (era barata, pero no tanto) con poca experiencia que acababan “poniéndosela de sombrero” tarde o temprano. Corría mucho, como te digo, no se tenía mal, era dura y fiable (a pesar de lo que la mayoría crea sobre las 2T) y frenaba bien, siempre que todo estuviera a punto y en buen estado… y tú hicieras las cosas bien sobre ella, ya que el chasis con pinta “de alambrillo”, las ruedas estrechas y los frenos, con un disco trasero tan grande como los delanteros (algo típico de la época en que el agarre de la rueda no permitía frenar de delante “a saco”) no permitían errores graves.

En su época pude probar la de algún amigo y “flipar” con su aceleración y en años más recientes vivir de cerca la Copa Deccla RD, preparar alguna e incluso correr con ellas un par de veces. Y de ahí mi relación de amor-odio con ella: el motor es “prodigioso”, con par, simple, muy potente y divertido de llevar. Y el chasis, quizá suficiente en los 80, simplemente “horrible” si te acabas de bajar de una moto actual, ya que apenas notas cuando llegas a su límite. Y sobre todo, odio el freno trasero: se me bloqueó con lo que yo creí que era sólo rozarlo en la “entrada de la rápida de bajada de Cartagena” (ya sabéis, los que soléis rodar allí) y acabé contra las ruedas del final de la escapatoria. ¿Será que soy muy pijo para ella?

Lo último

Lo más leído