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Los cambios han favorecido el espectáculo en MotoGP

Fotos: Repsol Media

Tras la primera carrera del mundial 2014, he de reconocer que el cambio de reglamento para este año ha sido una opción acertada, consiguiendo un desenlace apasionante en Losail. Las diferentes opciones a nivel técnico han potenciado el resultado deportivo logrando que las estructuras menos potentes se acerquen más a los equipos de fábrica. Hay dos aspectos que han sido fundamentales tanto en la pretemporada como en la carrera de ayer: la división en categorías y los neumáticos.

Respecto al primer asunto, uno de los aspectos más importantes ha sido los 4 litros más de gasolina en las monturas Open (24 l.). Técnicamente, a la hora de acelerar/decelerar, las Open tienen ventaja. Aun así, las Factory han completado toda la carrera y no han visto afectada sus prestaciones por ello. Por otro lado, el hardware es el mismo para todas, aunque el software de las Factory sigue siendo libre. Aunque el principal objetivo no es otro que minimizar las diferencias con las estructuras de fábrica, las Factory terminarán llevándose el gato al agua a medida que avance la temporada. Tampoco debemos olvidar que estas motos cuentan con 5 motores a los que no pueden modificar sus especificaciones para toda la temporada, por 12 que sí pueden variar en el caso de las Open.

En lo que atañe a los neumáticos, las Open cuentan con compuesto blando y medio por duro y medio para las Factory, algo que se ha mostrado más ventajoso en las sesiones clasificatorias. Aleix Espargaró y su Yamaha FTR son un buen ejemplo de ello y, aunque la diferencia respecto a Márquez ha sido de casi 12 segundos, de no haberse caído Smith, Bradl y Bautista, la distancia con el ganador hubiera sido menor. Esta situación hubiese sido impensable el año pasado.

Las estructuras más potentes tienen suficientes recursos como para contratar a los mejores pilotos y desarrollar las motos bajo sus directrices. También reciben apoyo de otras estructuras externas para optimizar los resultados por lo que, es lógico que tengan menos gasolina y algo menos de neumáticos. Hace mucho tiempo que los aficionados no se planteaban que pudiese haber otras opciones diferentes a las habituales. Ayer pudimos ver una carrera de grupo con varios pilotos cerca de la cabeza.

Las numerosas caídas también han centrado parte de la atención este fin de semana y tienen su explicación. El Circuito de Losail es muy particular por diversos motivos. Simplemente su emplazamiento, en medio del desierto, origina que la temperatura caiga mucho a medida que se hace de noche con el consiguiente aumento de la humedad. La curva 2, a izquierdas, ha sido la protagonista y cabe recordar que en el circuito hay mayoría a derechas (10). Al margen de que el flanco derecho siempre estará más caliente, las 6 curvas a izquierdas son de diferente radio por lo que Bridgestone intenta encontrar un buen compromiso para todas ellas pero lejos de lo idóneo.

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