Es el dominador indiscutible del Zero TT, la categoría del Man TT reservada a motos eléctricas, superando cada año sus prestaciones y acercándose cada vez más al rendimiento de las motos de gasolina. Tanto es así que el reto de Mugen es batir la barrera de las 120 mph (193 km/h) de media en una vuelta al circuito de la montaña y que ya en 2015 los tiempos de John McGuinness y Bruce Anstey estuvieron al nivel de las Lightweight, motores de hasta 650 cc, bicilíndricos y con una potencia por encima de los 100 CV.
Para ello Mugen está trabajando en la Shinden Go, que según la información filtrada a la prensa será una clara evolución técnica sobre el modelo anterior, con el que McGuinness y Anstey han ocupado los dos primeros puestos del podio con autoridad en 2014 y 2015, dejando muy atrás al resto de una competencia que no es, por el momento, tan efectiva como la máquina japonesa.
Los planes de Mugen han sido desvelados en el Salón de la Moto de Tokio, aunque habrá que esperar hasta el 25 de marzo para ver los nuevos diseños de la moto, de la que no se esperan grandes cambios estéticos, siguiendo de esta manera la línea de años anteriores, en la que los ingenieros de la fábrica japonesa han centrado sus esfuerzos en la parte mecánica sin a penas mejoras exteriores.
Aunque aún queda tiempo para la prueba en la isla, de no aparecer de nuevo competidores con la capacidad, por ejemplo, de Moto Czysz, lo más seguro es que el triunfo vuelva a caer de nuevo en manos de los pilotos de Mugen y quien sabe si en el camino se romperá la barrera de las 120 mph.
