El objetivo es llegar al TT de la Isla de Man dentro de dos semanas con los suficientes kilómetros como para realizar una buena actuación frente a las rivales japonesas. Una de las firmas legendarias de las dos ruedas, Norton, está ultimando el desembarco de su V4 en el TT de este año. Bajo el control de Stuart Garner, la marca inglesa ya hizo una intentona en el TT de 2009 con Michael Dunlop a los mandos. La falta de competitividad de aquella NRV588 de motor Wankel rotativo (una evolución del que ganó en 1992) no le hizo desistir y ahora, se presentan de nuevo con una CRT “Made in England”.
La nueva máquina cuenta con un motor Aprilia RSV4 de 194 CV. Los técnicos de Norton han retocado el sistema de alimentación, suprimiendo el acelerador electrónico y el sistema de freno motor instalado por los italianos.
Un chasis artesanal doble viga de aluminio firmado por el prestigioso Spondon se encargará de la rigidez del conjunto. por supuesto, es multirregulable, pudiendo variar la posición del motor, la altura del basculante y la dirección.
La rueda trasera cuenta con sistema de desmontaje rápido, las llantas son unas BST de fibra de carbono para minimizar el efecto giroscópico y la masa no suspendida, y las gomas serán Dunlop. Para las dos paradas previstas (6 vueltas), Norton ha fabricado un depósito de 24 litros.
El equipo de suspensión recae en la sueca Öhlins. Según el piloto Ian Mackman, la estabilidad de la moto a alta velocidad es más que satisfactoria, asemejándose a las sensaciones de una 600 de supersport.
Veremos de lo que es capaz la nueva Norton, aunque la competencia se lo pondrá muy, muy difícil.
