Tras dos duros años de travesía por el desierto el genial piloto italiano Valentino Rossi parece haber recuperado la ilusión durante los primeros entrenamientos de pretemporada al subirse de nuevo a la Yamaha YZR M1.
Rossi regresa a la marca con la que ganó cuatro títulos mundiales en la categoría de MotoGP; 2004, 2005, 2008 y 2009. Y a la que abandonó para iniciar lo que parecía a priori una gran operación, competir con Ducati.
Lo que parecía un sueño para Rossi, competir con una moto italiana, acabó volviéndose una pesadilla, ya que nunca acabó de aclimatarse a la peculiar Ducati, y sus diferencias con el equipo estuvieron presente desde el primer día.
A pesar de que los entrenamientos de Cheste fueron bajo la lluvia Rossi se mostró contento de volver a pilotar la Yamaha, como mostró al publicar en su cuenta de Twitter una “conversación” mantenida con su querida M1:
“Hola. ¿Cómo estás? Te veo bien. Te echaba de menos. Yo también”. Acompañada de una foto del frontal de la Yamaha con el carismático 46 estampado de nuevo.
En lo referente a lo estrictamente deportivo, Rossi marco el sexto mejor tiempo en unos entrenos dominados por Álvaro Bautista, seguido del alemán Stefan Bradl (Honda). Marc Márquez por sum parte no pudo estrenar la Honda debido a las malas condiciones de la pista.
