¿Qué puede salir de una simpática mezcla de motocross, un trazado tipo BMX y nuevas tecnologías? El resultado es lo que se pudo ver en el circuito de Zolder, que reunió a pilotos de renombre para esta especie de carrera de campeones de motocross sobre motos eléctricas. Entre ellos no podía faltar Stefan Everts, que tenía el privilegio de defender el título que consiguió el año pasado. El belga se subió a la última evolución de la KTM Freeride E para medirse con los pilotos de MX2 Valentin Guillod, Jordi Tixier y Damon Graulus. Entre los participantes, los pilotos locales Yentl Martens (hijo del campeón del mundo de 500 Jacky Martens), Marvin Vandaele, Greg Smets (hijo de Joel Smets), David Cools o el freestyler Gilles DeJong.
Después de una serie de mangas clasificatorias que ganaron Jordi Tixier y Valentín Guillod, la manga final comenzó con el holeshot de Valentin Guillod, por delante de Jordi Tixier. En una carrera en la que el único ruido era el zumbido de los motores eléctricos de la Freeride E y el sonido de los neumáticos sobre la arcilla del circuito de Zolder, Stefan Everts no tuvo una buena salida y se vio envuelto en una bonita pelea entre varios pilotos lejos de los puestos de cabeza para terminar en la sexta posición. Al final, victoria de Guillod, seguido de Tixier y Daan Bruijsten. El espectáculo corrió a cargo de Gilles DeJong, que realizó un backflip sobre la KTM Freeride E.
