Me gustaría saber qué podría estaría pasando por la cabeza de este motorista americano que, ante un inminente choque por alcance, no utiliza los frenos y únicamente baja un pie al suelo en un inútil intento de reducir la velocidad mediante fricción.
Normalmente y ante una situación de pánico, la reacción de supervivencia habitual es lanzarse al freno delantero con todas nuestras fuerzas, lo que deriva en una caída por bloqueo si no disponemos de ABS. Pero en este caso, el que se bloquea no es la rueda sino el conductor que, simplemente, no hace nada por evitar el golpe.
Podemos pensar que se trata de un conductor sin la debida experiencia y superado por el momento en cuestión. Lo cierto es que además de no frenar, tampoco busca una escapatoria por uno u otro lado del coche que le precede.
Por si esto fuera poco, no contaba con el equipamiento adecuado. Únicamente casco pero va vestido con unos pantalones normales y en camiseta. Incluso no lleva ni los pertinentes guantes por lo que además del golpe se habrá llevado unas más que dolorosas quemaduras por rozamiento que le atormentarán durante las próximas semanas.
Cómo frenar correctamente
Debemos recordar que frenar correctamente requiere el uso de los dos frenos en todas las condiciones. De esta forma y ante una emergencia, tendremos automatizada la reacción a base de hacerlo una y otra vez y por lo tanto, tendremos más posibilidades de realizar una frenada de emergencia son seguridad y eficacia.
En primer lugar debemos utilizar el freno trasero. Esto rebajará el centro de gravedad y estabilizará la moto, al mismo tiempo que mejorará la transferencia de peso cuando apliquemos el freno delantero que será a continuación.
Este lo utilizaremos de forma progresiva para que la moto apoye la rueda delantera y así aumente la adherencia y, posteriormente, con mayor intensidad. Al mismo tiempo, iremos aliviando el freno trasero para evitar el bloqueo en la medida que sea necesario.