Batman es motero

En la nueva entrega del superhéroe más real y oscuro, desde mi punto de vista, que se ha aportado al cine ahora viene con un currículum bajo el brazo de coches y motos, mezcla entre fantástico y real que cualquier hijo de vecino desearía tener.
Batman encarnado por segunda vez por Christian Bale representa a Bruce Wayne el millonario que a todos nos gustaría ser, sino a quien no le gustaría estampar un Lamborghini Murcielago LP640 de tan solo 12 cilindros y 640cv para tener como vehículo secundario un Batmovil convertible en caso de desastre en Batpod o moto de armas pesadas y ruedas de ancho 50,8 cms. Pues si tenéis razón para que leches quiero yo una moto con ese calibre de ruedas cuando tengo aparcada en el garaje una pedazo de MV Agusta F4 RR.
La última joya de la marca italiana que ahora pertenece a Harley Davidson cuenta con la no despreciable cifra de 190 cv y una velocidad punta de 312 km/h, claro que el caprichito se llama como 24.000 euros y normalmente los mortales como yo, no solemos ganar eso en unas hora o tenemos un ser femenino en casa que si no nos hace entrar en razón por la buenas empleará otras artes.
Para los que no halláis visto la película, os la recomiendo y os la recomiendo no por un este o aquel detalle sino por todo, porqué difícilmente se pueden crear con tanto detalle unos personajes, unos escenarios, un todo que haga que las 2 horas y 33 minutos de duración se pasen volando, ver como se gesta un perfecto dos caras encarnado por Aaron Eckhart o que un Joker te haga pensar si estas viendo la mejor reencarnación del mal en un tristemente fallecido Heath Ledger que permite sumergirte en la película desde el principio.
Pero bueno solo son las impresiones de este que pierde neuronas por los efluvios de su depósito de gasolina cada vez que monta a lomos de sus dos ruedas.