BMW R nineT por Workhorse Speedshop: sabor al AMA de los 80


Ya hemos visto varias preparaciones utilizando como base la BMW R nineT, pero quizás ninguna como esta realizada por la gente de Workhorse Speedshop para uno de sus clientes. Las premisas eran claras: un look muy agresivo y la posibilidad de revertir todos los cambios que se le hicieran.
Tras meditarlo unos cuantos días, la solución se les puso a tiro rememorando las motos con las que se competía en los años ’80 en el campeonato americano AMA Superbikes. Hablamos de motos naked, de manillar ancho y potencia suficiente como para arrancar los brazos gracias a la aportación de los conocimientos de genios como Pop Yoshimura, por poner un ejemplo.
Para conseguir ese look tan particular y ochentero, Brice Hennebert optó por fabricar un chasis y subchasis superior que encajase sobre el original y sobre el que podría anclar los nuevos elementos, permitiendo si fuese necesario la reversibilidad que le había solicitado el cliente.
En él colocó un nuevo tanque de combustible, de formas cuadradas y dotado de un tapón rápido Racefit así como un respiradero Earl’s Performance. Detrás, un asiento a medida en alcántara colocado sobre un soporte de aluminio y hecho por los holandeses de Silver Machine.
Los guardabarros son nuevos, así como las luces, la trasera LED empotrada y la delantera (doble) encajada en la placa portanúmeros. Como curiosidad, tanto la placa frontal como el radiador de aceite están anclados directamente al chasis con un nuevo soporte, con el fin de dejar lo más ligera posible la dirección. ¿Y por qué el número 163? Pues porque ese era el que utilizaba el campeón del AMA de 1976 Reg Pridmore cuando se llevó el título sobre una BMW.
Detrás, una instrumentación Motogadget, manillar y torretas de LSL, acelerador y puños Accossato así como bombas de freno y embrague Brembo. Encontramos mejoras también en los frenos, con latiguillos Earl’s Performance así como pinzas radiales monoblock Brembo M4. Llama también la atención el peculiar tratamiento de la horquilla delantera, enfundada en una especie de calcetines con el que se consigue un acabado realmente curioso.
Los colectores son artesanales mientras que el escape final es de Tyga. El amortiguador trasero proviene de Nitrol, los neumáticos son unos Conti Sport Attack 3 y los estribos, Gilles Tooling.
Por último queda el esquema de pintura, escondido bajo los patrocinadores. Decidieron huir de los colores originales de BMW Motorsport, encontrando su fuente de inspiración en la decoración de los monoplazas Lola de la Indy Car de los años ’80, incluyendo su patrocinador Valvoline que lo es también de Workhorse Speedshop. El trabajo fue hecho por Moto Peinture.