Quien más y quien menos conoce las carreras de aceleración que se celebran en Estados Unidos. Preparaciones o prototipos, pero con un denominador común, acelerar más rápido que el rival y llegar lo antes posible hasta la línea de meta. Aún así, pensamos más en esas carreras que en las que se llevan a cabo por los aficionados con sus propias motos, con las que llegan a la recta y dan gas.
Es una forma relativamente económica y segura de poner al límite la maquinaria en un entorno controlado y con unas medidas de seguridad para el piloto y los espectadores. Ahora nos vamos al vídeo en el que vamos a ver unas cuantas cosas que no hay que hacer.
Al más puro estilo de Grease, con chica en medio para dar la salida, empiezan 39 segundos de una grabación en la que podemos contar unas cuantas cosas que se están haciendo mal. La primera el que esté una chica en medio, más allá del asunto del género, que una persona esté en medio no es nada recomendable, pues ante el más mínimo fallo podemos lamentar un atropello.
Por si esto fuera poco, a la derecha de la imagen encontramos a un público muy entregado (eso no es problema) que está protegido por una triste cinta de plástico y algún neumático suelto. A la izquierda tenemos a alguna persona más, a estos les protege el la cuneta…
Además, tenemos un duelo coche contra moto, un clásico que entraña varios peligros cuando se está en una pista tan estrecha, aunque el principal es que la moto y su piloto sea embestido por el coche en caso de pérdida de control.
Para poner la guinda al pastel tenemos a un competitivo, pero no muy hábil, piloto encima de una Yamaha R1. Cuando la chica da la salida acelera con rabia su R1 pero, ¡oh sorpresa! la marcha no está engranada. Con la carrera ya perdida, pues el BMW ha cogido metros y con el cuentavueltas de la Yamaha casi en la parte roja, coge el embrague, mete primera y lo suelta sin ningún tipo de delicadeza. Seguro que pensaba volar en esa carrera, pero no se imaginaba que fuera de esta manera… Por suerte, todo quedó en un susto.
