¿Cómo hacer conducción defensiva? Así no...
Por la ciudad, siempre mil ojos


Cuando nos subimos a un vehículo, debemos tener presente que es necesario que apliquemos una conducción defensiva. Esto no quiere decir que no podamos disfrutar sobre la moto, pero sí debemos ir pendientes de todo lo que nos rodea, sin despistarnos y sin subestimar en ningún momento los peligros que nos acechan.
Esto es especialmente importante si nos movemos en ciudad, donde es fácil que todo se descontrole. Y si bien es cierto que los accidentes nunca suelen ocurrir por una sola causa, sí que muchas veces está en nuestra mano evitarlos. Incluso si no es nuestra culpa, pero nadie quiere hacerse daño. O si no, ocurrirá lo que vemos en este vídeo.
Vaya por delante que todos tenemos claro que la maniobra del coche es dudosa. Seguramente hay una calle transversal, un garaje... y por eso realiza el giro, orillado a la izquierda. El tuc-tuc que circula detrás aprecia perfectamente la maniobra pero nuestra protagonista, circula claramente a una velocidad indebida, adelantando y por el centro de los dos carriles. Entre que el propio tuc-tuc le habrá hecho de pantalla y que ella va muy despistada, todo acaba en una colisión.
De ir más atenta mientras realiza una acción que siempre entraña un peligro (adelantar), más todavía en ciudad (cruces y cambios de carril), seguramente habría evitado el golpe. Además, únicamente realiza una leve maniobra de esquiva pero claramente no puede/sabe frenar ante una emergencia. El scooter casi no ve disminuida su velocidad antes de la colisión. De haber realizado una frenada de emergencia correcta, puede que incluso hubiese evitado el golpe o, como poco, no habría salido despedida por encima del capó.
Por suerte, un susto y algunas contusiones. Esperemos que también una lección aprendida.