Diez consejos para que tu moto consuma menos combustible

La continua subida en el precio de los combustibles ha cambiado nuestros hábitos de conducción. Un incremento que hemos sufrido en los últimos años y que ha venido acompañado de una crisis que nos ha dejado a todos con el agua al cuello. Dicen que lo peor de esta crisis ha pasado y en las últimas semanas los precios de las gasolinas han ido bajando.

Esta “relativa alegría” no nos puede despistar a la hora de coger nuestra moto, así que el ahorro en combustible es una de las medidas cotidianas que céntimo a céntimo nos puede dar una alegría a fin de mes. El consejo que siempre se nos da desde algunas instituciones es que hay que conducir de manera eficiente, pero ¿qué significa esto? ¿que hay que ir más despacio?

En www.Soymotero.net te ofrecemos algunas pautas con las que se puede reducir el gasto en gasolina. Unas medidas fáciles de cumplir para que nuestra visita a la gasolinera no sea tan habitual.

El estado de nuestra moto

De poco van a servir los consejos que os vamos a proponer a continuación si nuestra moto no está en perfectas condiciones. Revisar ciertos puntos nos va a ahorrar dinero y más de un problema mecánico, que a la postre también se va a convertir en un desembolso económico. La bujía o los filtros son elementos que se pueden comprobar de manera rápida y que influyen en el gasto de combustible.

Vigilar los neumáticos

La presión y el estado de los neumáticos influye mucho en el gasto de combustible. Con los cambios bruscos de temperatura la presión puede descontrolarse. También hay que tener en cuenta que los compresores de las estaciones de servicio no son del todo fiables. Lo mejor sería tener un manómetro de mano para comprobar la presión real después de hinchar las ruedas.

Usar la ropa adecuada

Las prendas holgadas o desabrochadas influyen negativamente en la aerodinámica y por lo tanto ofrecen más resistencia y aumentan el consumo de combustible. En verano es más habitual ver usuarios con la cazadora abierta para combatir el calor, a costa de gastar más gasolina.

No sobrecargar la moto

Si tenemos que llevar equipaje, habrá que colocarlo de manera racional. En los scooter hay que aprovechar el hueco debajo del asiento para llevar los objetos que quepan. Para el resto de motocicletas y también para scooters existen infinidad de bolsas, mochilas, alforjas, maletas, etc. específicas para cada modelo que a la larga nos vana permitir conducir de manera más cómoda.

Utilizar tarjetas de descuento

Todas las compañías tienen sus propias tarjetas con las que ofrecen descuentos a la hora de repostar. Si realizamos un trayecto habitual diariamente nos vendrá bien conseguir una de la marca que nos quede a mano. También algunas superficies comerciales ofrecen descuentos si se realizan compras, o al revés, si repostas te ofrecen descuentos en compras. Hay que utilizarlas con cabeza para no gastar al final más de lo que necesitamos.

Conducción eficiente

Nuestra manera de conducir se refleja en el consumo de gasolina. Hay que evitar acelerones y frenazos, salir de los semáforos sin creer que estamos en una parrilla de salida o mantener velocidades constantes nos va a ayudar a ahorrar poco a poco unos céntimos que se van a ir convirtiendo en euros.

Repostar en ruta

relacionado con el anterior punto, lo mejor siempre es repostar en la gasolinera que nos quede más a mano. Por supuesto que hay que comparar precios, pero de poco nos servirá realizar más kilómetros para repostar en una gasolinera más barata si al final nos lo vamos a gastar por el camino.

Planificar la ruta

En viajes largos deberíamos tener claro el camino que vamos a seguir y las paradas que vamos a realizar. Los sistemas de navegación, ya sea en nuestro móvil o en GPS que podemos acoplar a la moto son de gran ayuda, pero tenerlo claro desde el primer momento es más útil.

Parcial a cero

Si seguimos una rutina al repostar, como poner los mismos litros o llenar el depósito y ponemos el parcial a cero, tendremos una estimación de cómo hemos conducido hasta el próximo repostaje. Se pueden hacer mediciones más exactas, pero eso ya es para los que se preocupan en profundidad por el consumo. No vale fiarse de la cantidad de dinero que repostamos, ya que el precio del litro de gasolina va cambiando semana a semana.

Repostar a principio de semana

Lo puedes llamar mito o leyenda urbana, pero lo cierto es que los lunes el precio de la gasolina suele ser más barata. Si podemos llenar el depósito un lunes, mejor que un viernes o un sábado. No es una práctica generalizada, pero muchas estaciones de servicio siguen esta pauta.