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Ducati no se vende: las motos italianas seguirán en el Grupo Audi

Ni Royal Enfield ni Polaris, Ducati seguirá perteneciendo al Grupo Audi. Al final las presiones de sindicatos entre otros han podido más que las ganas de “hacer caja” y la mítica marca italiana no cambiará de propietarios.

Después de muchos rumores, algunos originados dentro mismo de la fábrica italiana o en algún despacho de sus propietarios alemanes, parece que… no pasará nada. Ducati, la joya de la corona de Audi, seguirá formando parte del grupo germano. Seguro que la noticia tranquiliza a muchos seguidores de la marca de Bologna, ante el futuro incierto que se planteaba según quién pudiera haberla comprado.

Por lo que se ha sabido, ha sido el mismo Rupert Stadler, CEO del grupo Audi-VW, quien ha puesto fin a la posibilidad de ceder la histórica marca de motos, algo que había trascendido en los últimos meses. Todo esto empezó como un efecto secundario del ya famoso “dieselgate”, es decir, las trampas de homologación que algunos coches con motor diésel de las marcas del grupo tenían en la programación de sus centralitas. En el laboratorio medían como debían, pero en la calle no, contaminaban mucho más, y después de descubrirlo una agencia americana… se desataron las reclamaciones de clientes (con cambios de coche incluso) y multas de agencias internacionales. Al final han sido muchos millones de euros (se estima un unos 27.500 millones contando todo), y la posible rentabilidad de la venta de Ducati apareció como una solución para el grupo.

De la venta de Ducati se ha estado hablando todo el verano. Los posibles compradores han ido apareciendo y desapareciendo según los rumores. Desde la india Eicher Motors, dueña de la marca Royal Enfield, que ofreció 1.600 millones de euros y parecía que iba a ser la oferta definitiva, hasta la empresa propietaria de la marca Benetton, que había ofrecido 1.200 millones. Sin olvidarnos de la americana Polaris, o incluso la empresa del antiguo propietario de Ducati Andrea Bonomi (Investindustrial).

La venta se habría podido cerrar por unos 1.500 millones de euros, y pareció que los alemanes estaban por la labor, pero se levantaron contra la operación los sindicatos (italianos y alemanes) con suficiente peso en el consejo de administración como para bloquear la venta. El mismo CEO de Ducati, Claudio Domenicali, hizo saber recientemente a los sindicatos y el cuadro de dirigentes de la marca de Borgo Panigale que seguirá formando parte del grupo alemán.

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