Las normativas “Euro” responden a un conjunto de normas y reglamentos que se aprueban tras negociaciones a nivel europeo, y poco a poco tratan de conseguir vehículos cada vez más eficientes, respetuosos con el medio ambiente y también seguros. A partir del 1 de enero de 2021 todas las motos sin excepción deberán ser Euro 5, con un futuro a corto plazo que nos equipare con los coches al ir reduciendo los plazos entre una y otra. Queda muy lejana ya aquella Euro 1 de 1999, actualizada en forma de Euro 2 (2004), Euro 3 (2006) y Euro 4 (2016) en lo que llevamos de siglo.
Está claro que el COVID-19 está lastrando este proceso de “adaptación” en la industria de la moto, con muchas fábricas cerradas y sin existencias de los suministradores habituales. Menos tiempo para trabajar con normalidad también afectaría a los departamentos de I+D, a las pruebas y la fase final de desarrollo de algunos modelos 2021, sin contar los modelos que “morirán” en el último trimestre de este año.
Otro hándicap es la imposibilidad de vender actualmente modelos 2020 porque todos los concesionarios están cerrados. Hay motos ya señaladas y listas para entregar, pero habría que saber cuántas de esas unidades Euro 4 quedan por matricular. Si son numerosas, habría que incentivar sus ventas con buenas ofertas para acelerar el proceso cuando la crisis del Coronavirus pase, cerrando el total antes del 31 de diciembre. Una prórroga trimestral permitiría la convivencia natural de modelos de ambas normativas sin prejuicio para ninguna.
Un último aspecto que podría beneficiar al sector es el cambio de comportamiento del consumidor cuando todo vuelva a la normalidad. Decidirse por una moto nueva para desplazarse habitualmente en lugar del transporte público podría ser una excelente opción al ir más protegido y ser un medio de transporte individual.
También queda claro que las marcas con más recursos ya tienen los deberes hechos desde hace tiempo pues el salto de normativa conlleva un proceso de mínimo 3 años, si bien son las menos potentes o las que dependen directamente de la industria china las que podrían verse más perjudicadas. Sólo el tiempo lo dirá.
