En Assen, me encontré otro fin de semana complicadísimo por la lluvia y las altas temperaturas, fue un desastre. Era muy difícil para mi rodar si sentir los neumáticos. No me daban nada de confianza y presentía que de un momento a otro me iban a resbalar las gomas. Finalmente la carrera fue en agua, y pude adelantar algunos pilotos, pero sólo los de la parte de abajo de la clasificación, acabando en la 20ª posición.
La siguiente cita del mundial fue en Mugello, un circuito al que me moría de ganas de ir. Es una pista increíble, bonita, técnica, difícil, y todo lo que le rodea también es precioso. Pero también sabía que iba a ser difícil ser competitivo.
Desde el viernes hasta el domingo avanzamos algo con la moto, pero saliendo tan retrasado es difícil ir hacia delante si no tienes un buen ritmo. Las primeras vueltas detrás del grupo fueron una locura, hay gente que por ganar alguna posición entran en el embudo tocándose, y llevándose a la gente por delante. Lo dicho, una locura, pero el ritmo que mantuve en la carrera no estuvo del todo mal.
Si algún día queréis ir a ver alguna carrera del Mundial por Europa, os recomiendo que elijáis Mugello, ¡me encantó! La Toscana es muy bonita, y tenéis un lago precioso al lado del circuito para daros un buen chapuzón. Además, el ambiente dentro es una pasada, la gente entra con autocaravanas, se montan sus discotecas, y no veas la marcha que tienen toda la noche.
Ahora me voy a Albacete para la cuarta prueba del CEV, a ver si me pongo un poco las pilas y le meto caña a Jordi. El otro día estuvimos entrenando y no me fue del todo bien. Tras esta prueba nos iremos de nuevo al Mundial, en este caso a Alemania. Es posible que allí corra con Suter, para comparar rendimiento, a ver qué pasa, ya os contaré…
Muchos abrazos y de nuevo ¡gracias por vuestros ánimos!
