A pesar de hacer la “pole” y de ser muy constante durante todos los entrenamientos, hasta que no llega el momento de la carrera no se puede asegurar de que todo esté en orden. Jorge Lorenzo no lo tenía todo muy claro cuando se plantó en la parrilla de salida del Gran Premio de Qatar. Tras el “warm up” tomó una arriesgada decisión: montar el neumático blando detrás. Lorenzo no tenía buenas sensaciones con el neumático medio y decidió arriesgarse.
“Al final en las carreras tienes que jugártela y apostar y después del ‘warm up’ hemos visto que con el duro detrás no teníamos un gran ritmo y en vez de ir a mejor íbamos a peor y al final no teníamos alguna otra solución para pelear con Márquez y con Maverick, que parecían los favoritos para la carrera”, explicó Lorenzo. “Por eso hemos elegido el neumático blando detrás y ha ido muy bien, de menos a más. Ha sido clave el que haya salido bien la elección del neumático de detrás porque sino habría acabado quinto o sexto. Al final ha salido muy bien la apuesta”.
La de hoy ha sido una jornada de decisiones claves, porque también hizo un cambio de última hora en la electrónica, en la parrilla de salida: “También ha sido clave esa modificación que hemos hecho de la electrónica porque en varias curvas del circuito pusimos demasiado freno motor y en la vuelta de calentamiento he visto que se me bloqueaba demasiado de detrás y hemos decidido volver a la electrónica del test en esas curvas”.
Lorenzo destaca la diferencia en velocidad punta de las Ducati: “Por lo que he podido ver en carrera hay incluso más diferencia que el año pasado. Va a ser complicado en circuitos con recta muy largas”, dijo.
