Publicidad
[the_ad_placement id="adsense-mega-2-mobile"]

Kawasaki Eliminator: Cuatro décadas de historia y evolución

La marca acaba de reeditar el modelo con sendas versiones 400
Fotos: Kawasaki
La Kawasaki Eliminator llevaba desde la temporada 2007 descatalogada de la oferta de la marca nipona, algo que recientemente ha cambiado, ya que acaban de presentar su nueva Kawasaki Eliminator 400/Eliminator SE 2023. Hoy repasaremos la historia y evolución del modelo a lo largo de los últimos 38 años, dando habida cuenta de por qué la firma de Akashi ha decidido recuperar estas siglas entre sus filas.

Kawasaki ZL900 Eliminator: El inicio de todo.

En 1986 la primera Eliminator de la saga, conocida como ZL900 A2, se publicitaba bajo el eslogan “The quickest way to break away from the crowd”, (La forma más rápida de romper con la multitud). Este eslogan ya nos daba una idea de por donde podían ir los tiros a la hora de ponerte a los mandos de esta legendaria cruiser. ¿El motivo? Básicamente porque estaba dotada del mismo propulsor de otro modelo mítico de la época, la GPZ900R, tan de actualidad en estos días tras conocerse que la marca también planea su reedición.

Justo un año antes se presentaba de manera oficial el modelo, denominado en código interno ZL900 A1. Equipado con el potente tetracilíndrico con culata de 16V y 908 cc, fue acondicionado para la ocasión, entre otras cosas rebajando la compresión hasta los 9,2:1 desde los 11:1 iniciales, montando una batería de carburadores de 32 mm en lugar de los Kehin de 34 mm que montaba la Ninja, y adaptando la electrónica a las nuevas necesidades del modelo. El resultado seguía siendo impactante, tanto por el momento del que hablamos (mediados de la década de los ochenta) como la montura donde se daba; 105 CV de potencia a 9.500 rpm y un par máximo declarado de 85,3 Nm a 8.000 vueltas. ¡En una CUSTOM!

Folleto publicitario de la Kawasaki ZL900 Eliminator de 1986

En la parte ciclo destacaba un robusto chasis doble cuna tubular elaborado en acero, junto a un basculante posterior de doble brazo al que se acoplaban sendos amortiguadores laterales con ajuste de rebote hasta en 4 posiciones y 110 mm de recorrido máximo. En el eje delantero encontrábamos una horquilla telescópica con hasta 150 mm de distancia entre topes. La frenada por su parte corría a cargo de un doble disco de 280 mm y pinzas de 1 pistón delante, mientras que en la zaga un solo disco de 270 mm y una tercera pinza monopistón hacían el resto. Todo ello se hallaba anclado en unas llantas de 18 y 15 pulgadas, calzadas con neumáticos 100/90-18 (56H) delante y 160/80-15 (74H) detrás.

Aquella primera Eliminator 900 solamente se mantendría en el mercado las temporadas de 1985 y 1986, sembrando la semilla de una larga saga que se prolongaría de manera ininterrumpida hasta bien pasado el año 2007, con el último modelo de la misma, la Eliminator 125, siendo descatalogada finalmente de la gama de la marca japonesa. Pero para llegar a este punto hay que repasar todo lo que aconteció a lo largo de las más de dos décadas entre ambos modelos, quizás para comprender por qué, 15 años después de la desaparición de la última de las Eliminator, Kawasaki vuelve a la carga con estas míticas siglas con la nueva Eliminator 400.

KawasakiZL1000 Eliminator de 1986

Kawasaki ZL1000 Eliminator: Una 900 sometida a dieta de engorde

Dos años después de aparecer la ZL900, Kawasaki decidió crear una versión especial destinada a determinados mercados: la ZL1000. La idea era que, manteniendo las buenas cifras de potencia y comportamiento de la 900, ofrecer un modelo de mayores especificaciones que incorporara el motor más potente de la marca visto en las Kawasaki GTR1000, ZG1000 Concours o Kawasaki GPZ1000RX. Si bien este gozaba de algo más de potencia final, 110 CV a 9.000 rpm, también tenía que tirar de un mayor peso, 270 kilogramos en orden de marcha. Aunque las prestaciones seguían siendo de primer orden: 211 km/h de velocidad máxima y 4 segundos en alcanzar los 100 km/h desde parado.

Estéticamente, la ZL100 contaba con una línea algo más clásica y menos “Macho Bike” que la de sus hermanas de 900 y 750 cc. A ello ayudaba la adopción de un guardabarros trasero de mayores dimensiones o un depósito de combustible de mayor anchura y longitud. Si bien el modelo fue del agrado en mercados como el estadounidense o el australiano, Kawasaki solo lo mantuvo dentro de su oferta en aquella temporada de 1987 y la siguiente de 1988. Además, se comercializaron versiones limitadas a 100 CV en países como Alemania, Italia o Suecia, adaptándose a la normativa que imperaba en aquellas fechas en buena parte de Europa.

Kawasaki ZL750 Eliminator

Kawasaki ZL750 Eliminator: Misma fórmula y resultado

Aquella misma temporada de 1985 también nacería una variante “siete y medio”. La Kawasaki ZL750 Eliminator emplearía la misma fórmula vista en su hermana de más cubicaje, pero su comercialización estaría destinada en exclusiva al mercado japonés. Para la ocasión, la marca de Akashi emplearía el mismo propulsor ya visto en la GPZ750R y al igual que haría en la variante de 900, daría pequeños retoques para adaptar el funcionamiento del potente tetracilíndrico a sus nuevos quehaceres dentro del marco de esta Eliminator 750.

En cualquier caso no defraudaría, básicamente porque los 77 CV a 9.000 rpm junto a un par máximo de 66 Nm a 7.000 vueltas, serían más que suficientes para cubrir las necesidades del modelo y la filosofía de este. En la parte ciclo replicaba los elementos de la Eliminator 900. Esto se traduce en el mismo equipo de suspensiones, frenada o llantas y neumáticos. Curiosamente, la versión de 750 era más larga, ancha y alta que su hermana mayor, aunque el peso en orden de marcha declarado se mantenía inalterado, 258 kilogramos. Lanzada al mercado ese mismo 1985 se mantendría prácticamente inalterada hasta 1989, conviviendo con nuevas variantes que irían llegando en los siguientes años tras la buena acogida por parte del público en general a nivel global.

Kawasaki ZL600 Eliminator

Kawasaki ZL600 Eliminator: La tercera en discordia

Un año después, en 1986, la marca japonesa decidía presentar una nueva variante dentro de la gama Eliminator. En esta ocasión la Kawasaki ZL600 se presentaba como una opción más racional, aunque a decir verdad seguía empleando la misma regla de tres que los modelos 900 y 750. Motor de su homónima deportiva en cuanto a cilindrada dentro de la gama Kawasaki, la GPZ600R Ninja, presentada apenas unos meses antes, junto a una parte ciclo preparada para poder hacer frente al torrente de potencia. De hecho en esta ocasión, y por primera vez, deciden mantener inalterado el propulsor, rindiendo exactamente las mismas cifras de potencia y par que el modelo deportivo de Akashi.

74 CV a 10.500 rpm y un par máximo de 53,9 Nm 8.500 rpm nos daban una idea de cómo se podía desenvolver la nueva cruiser de Kawasaki frente a la competencia. En la prueba que llevaban a cabo desde la publicación Cycle aquel mismo 1986 se preguntaban: “¿Cómo llamaría a una cruiser de 600 cc que tiene la altura del asiento de un tractor de jardín, la comodidad de una silla de cocina y es tan rápido como una Ninja?” Los motivos todos los tenemos claros ya a estas alturas y Kawasaki aún más, ya que seguía explotando ese concepto de cruiser “dopada” con todas y cada una de las versiones que iba sacando tras la primera Eliminator 900 de 1985.

Desde aquel 1985 la Eliminator 600, asignada al código interno ZL600-A, se mantendría sin apenas cambios hasta 1992, año en el que aparecería un restyling del modelo, la denominada ZL600-B, que se comercializaría hasta la temporada de 1997 aunque su producción se pararía unos meses antes. Esta llegaría con algunos cambios a nivel estético, como por ejemplo sus llantas, ahora de tipo radial aunque manteniendo las cotas exteriores del modelo precedente. También se suavizarían sus líneas, adaptándolas a las tendencias del momento, aunque la mecánica sería la misma de principio a fin a lo largo de las 12 temporadas que estuvo presente en la oferta de la marca. Algunos retoques en la parte ciclo, con un disco delantero de mayor diámetro o diversos ajustes en el apartado de la suspensión serían suficiente para alargar su vida comercial hasta el final de sus días.

Kawasaki ZL400 Eliminator de 1987

Kawasaki ZL400 Eliminator: “Molinillo cruiser”

También en 1986 se presentaría la conocida variante 400 del modelo y, como no podría ser de otro modo, bajo la misma arquitectura técnica que el resto de modelos amparados bajo la denominación Eliminator. Una encantadora imagen custom con un rabioso tetracilindrico traído desde la deportiva de la misma cilindrada que cohabitaba con ella dentro de la gama Kawasaki. En este caso el que se empezó a montar en la GPZ400R, presentada en la temporada precedente.

Este seguía a rajatabla la arquitectura mecánica de sus hermanas mayores y esto pasaba por equipar una culata de 16 válvulas con sistema DOHC, refrigeración líquida y una batería de carburadores Kehin de compuerta plana, en esta ocasión de 30 mm. Todo ello llevado al modelo cruiser se convertía en tácita declaración de intenciones que no hacía, sino confirmar que la saga Eliminator seguía extendiendo el concepto dentro de las filas de Akashi, ya fuera en Europa, EE.UU o Japón, para donde estaba destinada principalmente esta interesante versión.

Kawasaki ZL400 Eliminator

De este modo nos encontrábamos con una potencia declarada de 54 CV a 12.000 rpm y un par máximo de 33 Nm 10.500 rpm, datos inequívocos de lo que era capaz la cruiser de media cilindrada recién presentada por la marca japonesa. Esta se mantuvo casi inalterada, al menos en lo referido a la parte mecánica y ciclística, solamente con pequeños ajustes para no quedar desfasada a lo largo del tiempo hasta la temporada de 1995, llegándose a comercializar hasta en tres versiones distintas: estándar, SE y LX. También bajo códigos internos que variaron a lo largo del tiempo, ZL400A, ZL400B, ZL400C y ZL400D, todos ellos atendiendo al año de la versión en sí.

A diferencia de sus hermanas mayores, Kawasaki ofreció diferentes versiones que, al igual que ocurre en el modelo 2023 recién presentado, incorporaban algunos elementos extra en su equipamiento. Esto se daba principalmente en la llamativa Eliminator SE que recurría a un cupolino frontal o un esquema de color donde predominaba el negro. También contábamos con la opción de llantas de tipo radial en la versión LX, o de aleación de tres brazos si hablamos de la variante estándar. Sin embargo, el resto del conjunto compartía la mayor parte de elementos, siendo este objeto de un remozado visual en su última etapa, entre 1992 y 1995 donde se hicieron algunos cambios sobre todo en su parte posterior.

Kawasaki ZL250 Eliminator de 1987

Kawasaki EL250 Eliminator SE, LX, LH: Una mata gigantes en toda regla

Para 1987 Kawasaki llevaba ya tres años explotando su gama Eliminator en buena parte del planeta. Si bien había consolidado el modelo de manera eficiente en la mayor parte de mercados, en otros, como el europeo, vio un buen filón en seguir desarrollando modelos de menor cilindrada, pero sin dejar de lado las prestaciones, tal y como había hecho hasta el momento. Si bien es cierto que inicialmente esta EL250 empezaría a comercializarse en la zona asiática, finalmente llegaría hasta nuestro continente. Además, empleando el motor de una deportiva de la marca que paso sin pena ni gloria, al menos en nuestro país, la ZZR 250.

En esta ocasión ya no eran cuatro, sino dos los cilindros que montaba la Eliminator de nueva generación, colocados en disposición paralela y alimentados por sendos carburadores Kehin de 30 mm. El cambio de seis relaciones llevaba la potencia hasta la rueda posterior mediante cadena, dejando atrás el sistema de cardán de sus hermanas mayores. Más concretamente una cifra final de 33 CV a 12.500 rpm, aunque en las versiones japonesas llegó a contar con 40 CV declarados y una velocidad máxima de 155 km/h. El par máximo de 20 Nm a 10.000 rpm también variaba respecto a la variable nipona, con 23,5 Nm a las mismas vueltas.

Kawasaki ZL250 LX Eliminator de 1991

Lo que no cambiaba en ningún caso era ese espíritu rebelde que caracterizaba a la saga en general, pero que tomaba cierto énfasis en los modelos de menos cubicaje. Para ello Kawasaki volvía a recurrir a una parte ciclo eficiente al punto que la publicación Cycle en 1991 decía de ella: “La Kawasaki EL 250 no es una mini custom ordinaria. Su motor pide a gritos que lo expriman, no parece barata y ¡horror! Los frenos funcionan.” Todo ello nos volvía a poner en relieve lo que Kawasaki buscaba con este modelo y que, indudablemente, lograba con la aparición de una nueva variante de distinta cilindrada. Para desazón de sus rivales de la época, Suzuki GN250 o Yamaha SR250, poco o nada tenían que hacer frente a la dos y medio de Akashi. Si bien eran más baratas que esta, prestacionalmente o en términos de acabados y equipamiento estaba un peldaño por debajo.

A lo largo de todas las temporadas en las que estuvo en plantilla dentro de la gama Kawasaki, contó con diferentes variantes entre las que podemos encontrar a las Eliminator SE, LX y LH. Además, en Europa también se comercializó bajo la denominación Kawasaki EL252, con los ya conocidos cambios dentro de su propulsor, que además contaba con mínimas diferencias en sus cotas internas 62,0 x 41,2 mm: EL250 (Japón), 62,5 x 41,2 mm: EL252 (Europa), siendo la temporada 2002 la última en la que se mantuvo dentro de la oferta de la marca, si bien a partir de 1997 en algunos mercados se conocería bajo las siglas VN250 Eliminator.

Kawasaki Eliminator 125 2007

Kawasaki EL125 Eliminator: Fin de una saga

Con la Eliminator 125 de 1997 daba comienzo el fin de una saga. Si bien convivió con su hermana de 250 en buena parte de los mercados donde se comercializaba, la versión 125 estaba destinada a un público joven y principiante. Además, su llegada coincidió con la llegada del nuevo carnet A1. Pero, sin embargo, Kawasaki no dispuso de ninguna variante con más de 15 CV de potencia. En este caso el monocilíndrico de 124 cc refrigerado por aire ofrecía unos discretos 12 CV a 9.500 rpm, con un par máximo de 9,6 Nm a 8.000 rpm, cifras que movían con humildad los 135 kilogramos declarados en orden de marcha por la marca.

Estaba claro que la última de las Eliminator llegaba con la misión de servir como moto de iniciación a las nuevas generaciones de moteros. También como moto de autoescuela, donde se prodigó bastante hasta la temporada 2007, momento en el que dejó de comercializarse de manera definitiva en buena parte de los mercados donde tuvo presencia. Todo ello acompañado de una parte ciclo sencilla donde contábamos con un chasis tubular de acero, horquilla convencional de 33 mm delante y doble amortiguador trasero, anclados estos al basculante. En la frenada un disco delante de 260 mm y un tambor en el eje posterior eran suficientes para lo que pretendía esta Eliminator 125.

Eso sí, su reconocida fiabilidad, consumo ajustado y sencillez de conducción eran los atributos con los que atraía a sus potenciales clientes. Todo ello en conjunto además de un precio más o menos ajustado para la época, 590.000 pesetas en 1997, la convertían en la aliada ideal para los desplazamientos diarios en ciudad y vías interurbanas.

Kawasaki Eliminator 400/Eliminator SE 2023

¿Y ahora…?

En 2023 Kawasaki vuelve al concepto Eliminator, además de estar planeando la vuelta de modelos tan emblemáticos como la GPZ900R. Como ya os contábamos hace apenas unos días, la marca ha dado a conocer a su nueva cruiser de última generación. Lo hace intentando recobrar aquel concepto inicial que en 1985 estrenaba la ZL900. Pero la realidad es que todo aquello quedo atrás y hoy en día es prácticamente inviable endosarle el propulsor de una deportiva a una motocicleta custom de esta categoría, aunque a decir verdad, la mayor parte de las deportivas comparten mecánica con otros modelos de segmentos diferentes dentro de la gama de cada marca.

A lo que nos referimos realmente es que, si Kawasaki hubiera decidido crear una Eliminator a la vieja usanza, debería haber instalado el rabioso tetracilíndrico de 400 cc recién estrenado en la ZX-4R. Como ya sabemos a estas alturas eso es poco probable que ocurra en lo sucesivo, porque lo pasional ya es un nicho de mercado tan reducido que ni siquiera las marcas ponen empeño alguno en ocultarlo. No estaría mal una Eliminator 400 con casi 75 CV de potencia, o una variante 250 montada sobre el molinillo que equipa la ZX-25R… Seguramente, en no mucho tiempo, encontraremos a alguien que fabrique en su taller esa Eliminator que hoy, ya no, se ha atrevido a rememorar.

Soñar es gratis, así que seguiremos imaginando lo que pudo ser y no fue, aunque la nueva Eliminator 400 cumpla holgadamente con las expectativas de sus futuros propietarios.

Lo último

Lo más leído