La nueva generación de la Honda Forza podría utilizar distribución variable


Si hay un fabricante que ha apostado desde siempre por la tecnología de la distribución variable, esta es sin duda Honda. Sus motores VTEC han conseguido destacar por su rendimiento pero al mismo tiempo contenido consumo, obteniendo unas relaciones entre potencia/cilindrada muy elevadas. De ahí que con los años, la mayoría de los fabricantes les hayan ido copiando en mayor o menos medida.
Pero no pensemos que la tecnología VTEC es, simplemente, aquella que con una segunda leva hacía que las válvulas de admisión incrementaran su recorrido. Existen multitud de sistemas VTEC dentro de Honda: modificación del cruce de válvulas, de los tiempos de apertura, distribución de 2 o 4 válvulas por cilindro dependiendo del régimen (saga VFR), etc.
Así uno de estos sistemas podría implementarse en la siguiente generación de la Honda Forza 300 (en la 125 no estamos seguros). Honda presentó una patente en 2017 de un nuevo motor dotado de un segundo juego de levas para las válvulas de admisión que modifican el alzado de las válvulas y con ello, mantener la potencia minimizando las emisiones. En los dibujos, las levas son las siguientes: 61 escape, 62 bajas vueltas, 63 altas vueltas.
Curiosamente, la moto donde se implementaron los diseños de este nuevo motor es una Honda Fourshight, la antecesora de la Honda Forza. Este sutil detalle nos hace pensar que es una tecnología a aplicar en su scooter premium de siguiente generación.