A su paso por Budapest Silvestre se ha detenido junto al monumento a Ángel Sanz Briz, uno de los varios diplomáticos que han sido declarados Justos entre las Naciones por el Estado de Israel en reconocimiento a su labor humanitaria al arriesgar vida y carrera para salvar miles de hebreos del Holocausto.
Ángel Sanz Briz, encargado de negocios de la Embajada Española de Budapest, utilizó un decreto de 1924 para conceder pasaportes españoles a judíos sefarditas. La norma estaba derogada, pero los alemanes no lo sabían. Lo que sí sabían era que había pocos sefardíes en Hungría. Se le concedió autorización para doscientos pasaportes. El español, los amplió expidiendo diversas series que nunca superaran el número 200. Mientras se tramitaban, alquiló viviendas para esconder a los judíos. Las protegió como anejas a la legación española. Declarado Justo entre las Naciones en 1966, una placa en la embajada lo recuerda.
Estando en la ciudad Miquel Silvestre ha aprovechado para montar en Atrevida, su BMW R1200 GS, unos Continental Trail Attack que han llegado en su justo tiempo gracias a las gestiones de Continental Moto España, que irá enviándo neumáticos cuando se precise el cambio de los mismos.
Los mecánicos de Yamaha World, en la calle Soroksári út 158, han procedido al recambio y equilibrado para que Silvestere pueda proseguir su viaje dirección a Munich, donde tiene previsto entregar un ejemplar de su libro Un millón de piedras a Christine Graeber, del departamento de comunicación de BMW Alemania y amiga del autor.
De vuelta a España para el BMW Riders 2011
Silvestre volverá a España para asistir al BMW Riders de Formigal invitado por la organización para impartir una de sus dinámicas presentaciones sobre viajes y aventura en moto, siendo esta conferencia la única de este tipo que se realizará en esta edición.
