Existen algunos proyectos muy avanzados de ruedas para coches sin aire y algunos de esos diseños se han probado ya en bicicletas y podrían llegar a no mucho tardar a las motos ligeras. Pero aunque la rueda se inventó hace muchos siglos, quedan todavía ideas para mejorarla: ahora es Michelin la que presenta unas ruedas con llanta flexible, desarrolladas junto al especialista en llantas Maxion. El neumático se llama Acorus y en este vídeo puedes ver en qué consiste la tecnología conjunta…
La cantidad de neumáticos y llantas rotos por culpa de baches o bordillazos no es nada despreciable y de ahí nace esta idea. El cerco de la llanta es algo flexible y evita «pellizcar» el flanco del neumático ante un bache. Los radios o brazos también son flexibles para permitir que el cerco pueda deformarse ante un impacto, pero son resistentes ante esfuerzos más progresivos (en curvas por ejemplo). El neumático tiene dos flancos internos que evitan el contacto con la llanta y se deforman en caso de impacto, evitando además la pérdida de aire momentánea que podría ocurrir. Además, este sistema actúa como una suspensión extra ante baches, mejorando la comodidad.
¿Podríamos verlo en motos? Sería interesante porque lo que en coche es solamente un «gasto» (neumático y llanta rotos), en moto es peor: una caída y un accidente. Pero la idea detrás de estas ruedas es conseguir neumáticos de mínimo perfil (muy bajo) con llantas de mayor diámetro: los neumáticos de coche trabajan siempre casi planos y ése es el objetivo óptimo (perfil muy bajo). Las motos usan las ruedas en más dimensiones porque inclinan en las curvas, y la rigidez de la llanta por un lado, y la forma del neumático por otra (carcasa y presión de hinchado) son claves para el comportamiento. Pero si consiguen una llanta y neumático capaz de deformarse ante un bache (golpe seco), pero mantenerse estable en curva (deformación progresiva), sí que sería un avance en seguridad que evitaría caídas al pisar baches en curvas o rectas. ¿Lo veremos algún día?
