Cuatro dormitorios, cinco baños, discoteca, sala de juegos, piscina con palmeras al aire libre, jacuzzi, gimnasio, piscina cubierta, spa, ring de boxeo, cine… En los últimos días, la casa de Jorge Lorenzo ha dado mucho que hablar. Quizá, en un momento de crisis como el que atraviesa nuestro país no es el mejor momento para exhibir las posesiones ni la opulencia del cuatro veces campeón del mundo. A lo mejor la envidia de muchos aficionados y el no ser querido por una buena parte de ellos también influye pero, sea como fuere, el vídeo en el que aparece realizando una “visita guiada” por su megacasa no ha caído bien. Monster pagó “la fiesta”, pero Lorenzo es quien ha recibido todas las críticas.
La mansión que aparece en las imágenes es su segunda residencia ya que ahora está establecido en Lugano (Suiza). Que, además, todas las tumbonas de la piscina estuvieran repletas de espectaculares chicas Monster, o rodeado de ellas en la discoteca en plan “fucker”, ha terminado por dar la puntilla. Ya no está en Youtube y los agrios comentarios de las redes sociales durante la semana pasada han sido los causantes de ello. Nueve minutos y medio pueden ser demasiados para algunos, sobre todo por el tratamiento de la cinta y aunque el mallorquín cobre alrededor de 14 millones de euros por temporada entre sueldo y patrocinios…
