Publicidad
[the_ad_placement id="adsense-mega-2-mobile"]

Moto Guzzi V7 Racer: llega al mercado la café racer para sibaritas de lo retro

Fotos: Moto Guzzi
Derivada de la moto de exposición V7 Clubman Racer presentada en el pasado EICMA, esta joya pasará a venderse al público, en una serie limitada con muy pocas variaciones sobre el original, ideal para coleccionistas con pasión por lo retro.

Ha pasado casi un año desde que Moto Guzzi sorprendiera en el Salón de la Moto de Milán con varios modelos de exposición entre los que destacaba por su elegancia la V7 Clubman Racer, para que la firma italiana se decida a comercializar un modelo que, si bien nunca será un superventas, estaba siendo reclamado a gritos por el público desde que pudimos verlo en el EICMA.

Con leves retoques sobre aquella concept bike y la denominación final de V7 Racer, esta moto supone un homenaje a la trayectoria deportiva extraordinaria de la V7 Sport, un icono en la gloriosa historia de la marca de Mandello del Lario en la competición.

Entre sus muchos méritos, la legendaria V7 Sport fue la moto más deseada de todas entre las motos de producción modificadas de su época. En un momento en el que la afición se debatía entre las motos japonesas, más potentes pero también más difíciles de pilotar, y los fans de las motos deportivas italianas que, aunque en desventaja en términos de caballaje, podían presumir de poseer mejores chasis y un rendimiento de frenada superiores al de sus adversarios de varios cilindros.

Moto Guzzi ha sabido captar la esencia del espíritu de esa época, reinterpretando con pasión el sello distintivo de la marca condensado en este modelo de producción. Fabricada en una edición numerada en la tija, la V7 Racer es una celebración de las líneas de estilo clásico de la marca Moto Guzzi, en una mezcla perfectamente equilibrada de artesanía y tecnología.

Moto Guzzi V7 Racer - detalle motor V7

Motor V7, una seña de identidad de la marca.

Depósito cromado adornado con una elegante correa de piel. El chasis, basculante y bujes acabados en rojo han sido tratados para acentuar el brillo final resaltando la pureza estética de la estructura de doble cuna. Coronando el conjunto, el sillín deportivo monoplaza (existe versión biplaza opcional con sus correspondientes estribos) está tapizado en gamuza y rematado por una tapa de colín aerodinámica que incorpora numeración al más puro estilo setentero.

Moto Guzzi V7 Racer - cuadro de instrumentos y numeración en tija

El tablier fusiona perfectamente dos discretas pantallas digitales con el espíritu retro del conjunto. Sobre la tija podemos ver la placa con la numeración del modelo.

Con su pequeña pantalla de plexiglás por encima del panel que luce el número de dorsal, el carenado superior – una expresión ejemplar de la escuela Guzzi – recuerda a la parte frontal de la legendaria Gambalunga y está en perfecta armonía con el nuevo diseño del guardabarros delantero. Una de las características más distintivas de esta edición especial única es el uso generalizado de los componentes a medida en aluminio pulido y taladrado. Este tratamiento hechos a mano, que requiere de una gran habilidad artesana, se ha aplicado a los paneles laterales, defensas y el sostén del silencioso.

En fin, podríamos estar horas escribiendo sobre todos los detalles de esta perla de dos ruedas: mejor que os recreéis viendo las fotos. Aunque aun no se conoce el precio que tendrá, no será barata, pero tampoco será una mala inversión, ya que este tipo de motos, no sólo no bajan de precio sino que, generalmente, se revalorizan con los años.

Lo último

Lo más leído