El aterrizaje del Circuito de Catalunya en el Mundial de Motociclismo coincidió con una temporada realmente extraña. Mick Doohan se demostró desde la primera carrera como el gran dominador de la categoría, pero aún así no pudo ganar el Mundial.
Esa temporada también se cayeron del calendario las carreras de los Estados Unidos, Checoslovaquia, Yugoslavia y Austria, Wayne Rainey creó el IMRA para presionar a los organizadores en cuestiones relacionadas con la seguridad y, lo más importante de todo, se utilizó un nuevo sistema de puntos sólo para los 10 primeros clasificados (que fue nuevamente modificado la temporada siguiente) sin el que el propio Rainey no habría ganado su tercer campeonato para Yamaha.
El GP de Europa disputado en Montmeló fue la única ocasión en toda la temporada en que Rainey realmente le ganó una carrera a Doohan en igualdad de condiciones, de tú a tú. Doohan y su Rothmans Honda se habían impuesto en las cuatro primeras citas del campeonato en Japón, Australia, Malasia y España. En Mugello ganó Schwantz, Doohan fue segundo y Rainey se retiró por caída cuando luchaba por la victoria. Y después llegó el GP de Europa, la primera vez que el Mundial de Motociclismo pisaba el recién estrenado circuito permanente de Montmeló.
Carrera
Mick Doohan partía desde la pole position. John Kocinski y Eddie Lawson (por aquel entonces ya en su segundo y último año en Cagiva Corse) se intercambiaron el liderato en los primeros compases de la carrera, hasta que llegó por detrás el rodillo Doohan-Rainey imprimiendo un ritmo que nadie más fue capaz de seguir.
Teniendo en cuenta el desarrollo de las anteriores carreras esa temporada, lo único que estaba por ver era cuando Doohan se despegaría de Rainey, pero jamás lo consiguió. El piloto del Kenny Roberts Marlboro Yamaha se aferró a esa carrera como a un clavo ardiendo, tenía que hacerlo si quería conservar alguna opción de cara al campeonato, y a dos vueltas del final consiguió superar a Doohan al final de recta.
El australiano intentó recuperar a posición en el Estadio, ya en la última vuelta, pero no lo consiguió: Rainey cruzó primero la línea de meta con el australiano pegado a 0.057 milésimas. Dough Chandler entró tercero a 14.762 segundos.
Doohan ganó la siguiente carrera en Alemania con abrumadora autoridad y después se destrozó la pierna derecha en el Dutch TT. En ese momento, acumulaba una ventaja de 65 puntos al frente de la clasificación. Se perdió las cuatro carreras siguientes y regresó tras un arduo proceso de recuperación para las carreras de Brasil y Sudáfrica, donde finalizó 12º y 6º. Al final, Rainey ganó el Mundial por solo 4 puntos de diferencia. De haber mantenido el sistema de puntuación para los 15 primeros clasificados, habría finalizado segundo.
