Fundada en 1936, NGK Spark Plug es un gigante en la investigación y desarrollo de bujías para motores de combustión. Sin embargo la evolución del mercado en los últimos años con el auge de los vehículos eléctricos ha propiciado que en un futuro a corto plazo, cambie completamente su línea de negocio hacia la producción de baterías de electrolito sólido.
Takio Kojima, gerente general de ingeniería e I+D en NGK Spark Plug declaraba que: “Nos dimos cuenta de que era inevitable que la industria cambiara en algún momento del motor de combustión interna a los vehículos eléctricos de batería y que, en última instancia, esto podría volver obsoletas nuestras empresas de bujías y sensores de oxígeno.”
NGK aprovechará, a partir de ahora, su experiencia en materiales cerámicos desarrollados tanto para las bujías como para los sensores, con las que evolucionar las nuevas baterías de electrolito sólido y, con ello, mejorar la capacidad de las actuales baterías de litio que se prevé que comiencen a utilizar la nueva generación de vehículos eléctricos.