Ö Rei

El oro siempre ha sido sinónimo de poder, glamour, calidad y distinción. También fue el tono de color elegido para identificar los productos de la que para muchos es la mejor marca de suspensiones del mundo. Kenth Öhlin, crossero en sus tiempos mozos (ganó dos nacionales en Suecia), fundó la empresa en 1976 y, desde entonces, no ha parado de crecer situándose en la élite de las suspensiones de moto con sus especiales horquillas y amortiguadores. El característico logo “amarilloazulado” posee los colores de la bandera de Suecia desde 1981, aunque hay variantes más modernas en amarillo-negro.
Aunque Thorleif Hansen (Kawasaki) fue el primer “piloto Öhlins” de la historia, en 1978 llegó el primer éxito: el ruso Guennady Moiseev equipaba amortiguadores Öhlins en la KTM 250 con la que ganó el mundial de Motocross. Cuarenta años después, la marca sueca ya acumula más de 200 títulos mundiales en todas las especialidades de motor.
Al principio Kenth se dedicó a construir piezas específicas para competición como escapes, elementos de motor además de amortiguadores, pero cuando el mercado creció optó por especializarse en las suspensiones y abandonar todo lo demás. Por aquella época no había competencia seria y eso le ayudó mucho. Aquellos comienzos sentaron las bases del éxito, currando de lunes a viernes en el taller y conduciendo la furgoneta de asistencia a las principales carreras europeas los fines de semana.
Seguro que la herencia genético-técnica le influyó para alcanzar el máximo standard de calidad pues, de niño, Kenth ya trasteaba con el instrumental médico de precisión que fabricaba su padre.
El título de su compatriota y amigo Hakan Carlquist (Husqvarna 250) en 1979 fue el que más le ilusionó. Desde entonces, Kenth entendió que cualquiera que reclamase sus servicios debería pagar por la asistencia.
Aunque en 1987 Yamaha compró el 50% de las acciones de la empresa (siempre ha tenido independencia para funcionar), en 2007 Kenth recuperó el 45% de la compañía. Los lazos entre fabricantes de motos y suspensiones siempre han existido, por ejemplo, KTM/Husqvarna-WP, Honda-Showa o Kawasaki-Kayaba.
Su centro de operaciones se ubica en Estocolmo, tiene unos 200 empleados y 50 de ellos son ingenieros del departamento I+D. Un 16% de los ingresos anuales se reinvierten en esta última área.
La competición es el principal escaparate, aunque realmente Öhlins vive de los productos de calle. Este mes cumple 67 años y Kenth Öhlin sigue al pie del cañón como presidente de su empresa, supervisando todo el trabajo.
En España Öhlins goza de muy buena salud ya que su distribución corre a cargo de los especialistas de Andreani-MHS Ibérica desde 2013.
En el fondo, todos las preferimos rubias.