A partir del 14 de marzo, con la entrada en vigor del estado de alarma, se congelaron los plazos administrativos para cosas como la ITV o la caducidad del carné de conducir. Si te han vencido, tranquilo que no te multarán por eso si conduces con motivo justificado. En teoría, como decimos, la ley vigente habló primero de “congelación” de plazos: ahora si te quedaban por ejemplo unos días para pasarla en marzo, cuando se levante el estado de alarma empezarán a contar 30 días de prórroga por este motivo.
Las zonas que han pasado a la Fase 1 de desescalada ya tienen la posibilidad de ir a las ITV, pero solamente con cita previa (no libremente) además de cumpliendo las normas sanitarias correspondientes. Porque, hasta ahora, desplazarse a pasar la ITV no era uno de los supuestos aceptados para poderse mover en coche o moto (sí era posible hacerlo para ir al cajero o repostar). Solamente en caso de haberla pasado antes, y haber sido rechazada, se podía hacer (hay un plazo de dos meses para solucionar el fallo grave que causó el rechazo). Pero casi todas las ITV han cerrado dado el mínimo tráfico que estaban teniendo… Otro buen lío como ves. Pero ahora, cuando vayan abriendo, llegará el problema de la acumulación.
Hasta final de septiembre
Para evitar esos colapsos, o retrasos más allá de la prórroga inicialmente prevista de 30 días si no se consigue cita previa, la Asociación Española de Entidades Colaboradoras de la Administración en la Inspección Técnica de Vehículos ha propuesto al gobierno varios cambios. Lo más destacado del plan de actuación es una nueva prórroga hasta el 30 de septiembre, calendarizada para quienes les caducaba la ITV durante el estado de alarma. También piden cursos rápidos para ampliar plantillas, cambiar la revisión interior en coches para evitar riesgos y ampliación de horarios. También indican que en las zonas donde el 11 de mayo no se haya pasado a Fase 1 (apertura de ITVs), como son sin ir más lejos Madrid o Barcelona, esa prórroga pudiera llegar más allá del 30 de septiembre.
