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Prueba Honda X-ADV 2017: Un nuevo horizonte en el multiuso

Fotos: Honda
Lo que se planteó como una presentación nacional se extendió a lo largo de mil kms para convertirse en una verdadera prueba a fondo de esta audaz apuesta de Honda. Es necesario abrir la mente, liberarse de prejuicios al subirse en este X-ADV y dejarse llevar por la magia de un multiusos automático inédito hasta la fecha.

¿Un scooter trail? Es la pregunta que se hacen muchos al escuchar hablar de él; aunque otros han ido mucho más lejos, y han llegado a escribir en las redes sociales insinuaciones como: ¿Qué se han fumado los de Honda?

Bien. Pues a pesar de esos prefacios y conjeturas baladíes, hemos de decir al lector que, tras su presentación nacional, que, por circunstancias diversas y por una revuelta meteorología terminó resultando un verdadero test en profundidad, hay que acercarse a la X-ADV, hay que tocarla y hay que escuchar alguna fundada explicación junto a ella. Pero, sin duda ninguna, lo que hay que hacer es probarla con la imaginación bien predispuesta, incluso con una parte de la fantasía volando, para llegar a entender lo que es capaz de desarrollar y todas las posibilidades que ofrece este nuevo invento de Honda, como muchos lo han calificado.

Pasemos pues a analizar esta X-ADV y veamos cómo se comporta en todos los escenarios posibles en los que puede evolucionar, más que dignamente, con una pasmosa naturalidad.

Un origen Integral

Efectivamente, la X-ADV toma como base el concepto Integra y también su motor, pero ahí quedan todas sus similitudes con el híbrido moto-scooter creado por Honda para la ciudad en 2014.

El chasis es más largo, el basculante también y la transmisión monta un desarrollo más corto; eso por no hablar de las llantas, de los frenos o de las suspensiones. Además, el DCT (Cambio automático de Honda) incorpora otro software, específico para la X-ADV, que cuenta como novedad con la asistencia de un sensor, como el de la Africa Twin, que detecta el desplazamiento de la moto en subida, llano o bajada, para variar su criterio de funcionamiento. Las tres secuencias de DCT, aparte de la más convencional, ofrecen en la X-ADV tres modos de cambiar la marcha, desde uno más suave hasta otro algo más agresivo.

Y es que, no en vano, respecto a la Integra, y respecto al mercado en general, las siglas ADV no representan sólo el concepto Aventura, sino que también dan pie a la palabra inglesa advance.

Honda X-ADV en grupo en marcha

El motor

Más que lleno, se siente repleto gracias a ese par de coche que ofrecen sus dos pistones en paralelo con una cilindrada media en el mundo de la moto. La entrega de sus 54 CV se regula también con los modos S-1, 2 y 3 del DCT, transmitiendo a la rueda, en cualquier caso, una de las tracciones más dosificables sin la imperiosa necesidad de una vigilancia electrónica. Y es que el conocido y archiprobado motor NC de Honda ofrece un comportamiento que está al alcance de cualquier mano principiante, a la par que muestra un empuje más que digno en la salida de los virajes, así como al afrontar un adelantamiento para todo aquel que ya haya cruzado el primer y el segundo umbral de la conducción sobre dos ruedas.

Su consumo en una conducción exigente y sin contemplaciones, a lo largo de una ruta que no tenía ni un solo kilómetro derecho y con los 107 kg de un servidor encima, registramos una cifra de 4,2 litros/100; pero podemos constatar que llevando a otros moteros menos pesados, a lo largo del mismo recorrido y con el mismo ritmo, el consumo se paró incluso en los 3,8.

Si tenemos en cuenta los 13,1 litros de capacidad urbana que alberga el depósito, la cuenta de la autonomía sale bien fácil, rozando los 400 km en viajes de autovía, sin viento y sin rebasar tampoco, claro está, los 120 por hora.

La posición

El manillar se sitúa bastante alto, con los extremos de los puños situados levemente en oblicuo, apuntando hacia arriba. Con ello, la sensación inicial de las muñecas y de los antebrazos puede parecer un tanto extraña, sin embargo se hace de lo más natural al cabo de los primeros kilómetros.

Los pies, por su parte, colocados en el término medio de las plataformas, toman una situación propia de la conducción urbana. Más adelante y dependiendo de las condiciones de uso, podrán variar, como veremos a continuación, la posición y la actitud del motorista en gran medida.

En cuanto al asiento, se sitúa a una altura accesible para prácticamente todas las estaturas, de manera que una persona con poco más de 1,60 y un mínimo de habilidad es capaz de sostenerse sin vivir situaciones realmente comprometidas, incluso en un camino de tierra. Desde luego que esta afirmación puede hacer sonreír a más de uno, viniendo de alguien que mide 1,91m, pero lo cierto es que tuvimos la ocasión de hacer esta prueba con alguien 30 cm más bajo que un servidor. En cualquier caso, se trata de una virtud ciertamente valiosa en un modelo que entra en directa competencia con trail lighs, o trail asfálticas, que de un modo bien diferente, se presentan en el mercado con una altura de caballo. Por último, este asiento de la X-ADV es amplio y, si puede haber alguna dificultad para los de menor talla será tan sólo por su anchura.

Y ya que hemos hablado de la posición sobre esta nueva apuesta de Honda, continuemos con un apartado tan fundamental en una multiusos como es la protección contra el viento. La pantalla, regulable manualmente con dos movimientos que obligan a operarse con la moto parada, en su posición más elevada de las cinco disponibles cubre muy arriba, justo hasta la altura media del casco, en un sujeto como el probador que firma este reportaje. Más abajo, el pecho se siente protegido en su parte central, quedando los hombros y lógicamente los brazos expuestos al viento. Rodillas y muslos se protegen al abrigo de la carrocería, no así el exterior de las pantorrillas, que reciben de forma directa el impacto de la intemperie. Los pies, sin embargo, quedan totalmente a cubierto, incluso calzando un 46, como es el caso. Y en cuanto a las manos, hay que señalar que los protectores pagan un tributo al aspecto estético, ya que tan sólo cubren el 50%, con los nudillos y las falanges expuestos al viento y a la lluvia.

Honda X-ADV en el paso por curva 2

La Frenada

Si hablamos con cifras y palabras técnicas, a algún lector no le llegará el mensaje completo de lo que es capaz de frenar esta X-ADV. Pero si decimos que parte de su equipo de freno la toma de la Africa Twin, seguramente que todos se podrán hacer una idea de la capacidad de retención que brinda este multiusos; todo un portento que la iguala con cualquier naked de la categoría media y una gran ventaja, con el apoyo añadido del cambio DCT, frente a cualquier scooter con variador.

En Curva

Aunque el peso (238 kg) y la distancia entre ejes (1590 mm) le restan un cupo de agilidad y la alejan, sobre el papel, de la conducción puramente deportiva, qué duda cabe de que la X-ADV resulta sorprendentemente rápida a la hora de girar para entrar en el viraje, ya sea una rotonda urbana o una curva de montaña, lo mismo que su cintura para driblar el cambio de dirección al que obliga una ese de la carretera o a la salida de esa misma rotonda. Pero tal vez lo mejor que ofrece esta nueva Honda en una curva llega a continuación, en el propio paso por la misma.

El apoyo es sorprendente, impropio de un modelo que quiere recordar a un scooter y que, sin duda, será la envidia de un puñado de naked más ligeras y más potentes también. La X-ADV se agarra a la curva como una lapa, y permite tumbar y tumbar con confianza hasta que por fin roza el avisador fijado en el extremo del caballete central, con un ángulo que sencillamente no imaginamos antes de subir.

En cuanto a la reducción del motor, que hace el DCT antes de entrar en el viraje, ya es sabido que no resulta tan rápida como la de un cambio con palanca para el pie, que actúa directamente sobre su mecanismo. Sin embargo, Honda ha avanzado también en este aspecto, transmitiendo la retención del motor más pronto que en modelos anteriores con este cambio. En cualquier caso, hay que tener muy en cuenta que la X-ADV saca una ventaja abismal, en este terreno, a cualquier scooter deportivo de la competencia, se ponga como se ponga.

Para rematar la faena del viraje, la contundente patada del motor NC nos saca de la curva en un golpe de par (68 Nm).

Por último, entre las posibilidades que ofrece la ergonomía de la X-ADV, podemos encontrar que la postura de los pies retrasados hasta posar sólo su mitad delantera sobre las plataformas y el tronco echado sobre el manillar facilita una inesperada conducción deportiva. Sí, una conducción que sorprenderá a más de uno y que dejará boquiabierto a alguno que otro tras el manillar de una moto corriente.

En ciudad

El radio de giro es suficientemente urbano como para ganar a buena parte de las motos y para competir de frente con una multitud de scooters. Por otro lado, su ergonomía facilita apearse y subirse a ella repetidamente, como lo haría un repartidor, mucho más que cualquier moto. Y su “punch” en la arrancada es tan contundente que no sólo deja clavada en el semáforo a la jauría de coches, sino que es capaz de quedar, sobre todo en el modo S-3, subcampeón entre los maxi scooters con más aceleración del mercado.

Honda X-ADV off road 2

Off Road

Para el aficionado al enduro obviamente, la X-ADV apenas si va a satisfacer sus más básicas necesidades. Puesto en pie sobre las estriberas diseñadas por Rizoma (extra), sentirá la carrocería apretándole el interior de las pantorrillas y echará en falta ese apoyo fundamental de las rodillas contra el depósito para guiar el giro de la moto, al mismo tiempo que se sentirá extraño cuando quiera echar el pie a una palanca de cambio que no existe. Lo mismo sucederá cuando haga lo propio a la del freno trasero, situada en el lugar de un embrague con el que no podrá contar para jugar en las trialeras. Sin embargo, si abriera la mente, se sorprendería del noble comportamiento que muestra sobre las pistas de tierra una moto tan pesada, con una llanta trasera de tan sólo 15” y con una parte de su vocación dedicada a tratar de robar el terreno a los scooters en el sentido diario más práctico de las dos ruedas.

Pero, visto de otro modo, desde el lado del asfalto, tanto para el motorista que no ha sentido inquietudes off road como para el novato de las dos ruedas, el Honda X-ADV les permitirá llegar a esa ermita visigoda sitauada al final de un camino, al chalé o al hotel rural de una finca edificado en el extremo de una pista de tierra y grava o a ese mirador natural que ha visto en internet, y al que se llega a lo largo de un carril en el que, ni en el más audaz de sus sueños, se hubiera atrevido a internarse con el scooter que le sirve para un transporte tan urbano como cotidiano.

En Mojado

El comportamiento de la X-ADV en estas condiciones es sencillamente soberbio. Si pensamos que tradicionalmente los scooters resultan comprometidos e inestables con el suelo empapado, este nuevo concepto de Honda, en lo que pueda tener de scooter, sencillamente lo pulveriza.

Para empezar, la efectividad que consiguen sobre el suelo mojado los Bridgestone Trail Wing, diseñados en exclusiva para la X-ADV, se manifiesta en el surtidor de agua que brota de la rueda trasera cuando el asfalto está encharcado. Realmente parece una moto de agua, en esas circunstancias. Tan sólo esa imagen ya ofrece el 50% de la confianza que transmite esta nueva Honda bajo la lluvia. En cuanto al mitad restante llega al sentir el aplomo con el que se coge al asfalto mojado. Así se explica *las frenadas exigentes, los giros rápidos y las tumbadas*…, sí, tumbadas verdaderamente incisivas que podemos poner en práctica con esta X-ADV cuando el cielo descarga la lluvia sobre la carretera.

En la autovía

A diferencia de cualquier moto, la extensión a la larga de las plataformas que la X-ADV ofrece para apoyar los pies, más la extraordinaria extensión del asiento, permiten jugar con las posturas del cuerpo hasta ofrecerse como una excelente viajera a lo largo del escenario más tedioso para el motorista: la autovía.

Con los pies digamos en el rango urbano y el tronco recto, con los pies más retrasados y el tronco avanzando a una postura más aerodinámica o incluso con los pies adelantados arriba, y el tronco colgado de nuestros brazos, agarrados al manillar en una posición tan elevada que llega a dibujarnos sobre esta Honda con una silueta muy semejante a la de una cruiser del mundo custom, la X-ADV abunda en sus faceta multiusos, mostrándoes también como una moto multipostural.

Con todo ello, se hará más fácil combatir el aburrimiento de la autopista que con la inmensa mayoría de las motos que ofrece el mercado.

Con pasajero

La plaza trasera es de generosa amplitud, con un tapizado antideslizante, en un color distinto de la del conductor pero a juego con el resto de la moto y en una altura ligeramente elevada sobre la delantera.

Las estriberas abatibles pasan totalmente inadvertidas durante la conducción en solitario y se muestran anchas al desplegarlas, además de montar una goma bien generosa,. La solidez de unas asas laterales termina por afianzar al completo la posición del acompañante sobre la X-ADV.

Honda X-ADV en el giro de entrada a la curva 2

Detalles

  • Una iluminación con tecnología led se encarga de mostrarnos la carretera oculta bajo la oscuridad, lo mismo que hacernos visibles a los demás en medio de la noche.
  • Los espejos ofrecen una visión panorámica de lo que se acerca o de lo que queda en nuestra retaguardia; viajando instalados, además, sin sobresalir de la carrocería más que los protectores de las manos, permitiendo que la X-ADV se deslice con facilidad entre la densidad del tráfico.
  • El display ofrece una información completa, más allá de los datos que refleja cualquier ordenador de a bordo, mostrando bien visible, además, la marcha en la que nos movemos, así como el modo del DCT que hemos seleccionado.

¿Quiénes son sus rivales?

Pues invitamos al lector a que se siente y tome aire antes de leer la lista. Empezamos por los llamados scooters deportivos que no son rivales completamente directos, pero sí en una gran parte. Continuamos con los escasos scooters GT, frente a los que el X-ADV se presenta, eso, como un adversario un tanto indirecto que sin embargo les robará un buen número de ventas. Seguimos en el segmento de las motos propiamente dicho, donde sin duda las trail asfálticas, trail SUV o incluso otras trail, perderán cancha frente a esta propuesta de Honda. También algunas naked medias, que se presentan al usuario como su moto para la salida dominical, lo mismo que las sport turismo de la misma cilindrada, que se ofrecen en el mercado como moto ideal para las escapadas de fin de semana. Es que incluso esta X-ADV, equipada con unas alforjas blandas que añadir al top case que Honda ofrece ahora gratis con su compra, podría hacer frente a GTs como la propia Deauville o incluso otras de cilindradas muy superiores, para motoristas que no necesiten un gran motor con altas prestaciones.

En resumidas cuentas, casi que menos las deportivas puras y las custom…, bueno, las custom… La cuestión es que esta Honda X-ADV va a conseguir que muchos motoristas que para satisfacer sus inquietudes necesitan un scooter y una moto, o incluso un scooter y dos motos, pasen a cubrirlas en buena medida con esta audaz apuesta que la marca del ala dorada va a hacer en nuestro mercado a finales de abril de 2017.

Valoración Final

Una moto tal vez para el espectro más amplio de motoristas que se ha concebido hasta ahora, con un abanico multiusos que, sencillamente, no tiene parangón hasta la fecha en el mercado. Desde el trail más básico hasta el transito diario por el tráfico más intrincado, desde la salida dominical hasta el viaje vacacional, desde el tedio de la autopista hasta el tránsito por pistas de tierra, pasando también, por la diversión a lo largo de una carretera de curvas.
Como reza el título del reportaje, la Honda X-ADV dibuja un nuevo horizonte en el segmento multiusos de las dos ruedas con un precio de 11.500 euros. En promoción, Honda regala ahora su baúl trasero.

Lo mejor
  • Versatilidad
  • Fiabilidad
  • Precio
Mejoraríamos
  • El manillar choca con la pantalla
  • Los testigos de los intermitentes no destacan de día y con sol.

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