Prueba KYMCO Like 125 2018: el futuro fue ayer

A veces si miramos al pasado podemos entender el presente, pero también podemos mirar al futuro para adelantarnos en estos tiempos que corren. Quizás esta es la filosofía que ha llevado a KYMCO a construir el nuevo KYMCO Like 125, un scooter que nos recuerda estéticamente a grandes mitos del pasado pero que a su vez incorpora unas más que interesantes cualidades técnicas de futuro.

Nos fuimos hasta Segovia para probar por sus calles adoquinadas las cualidades de un modelo que cuenta con un gran secreto en su interior: un motor refrigerado por aire capaz de superar la futura Euro5. Sí, sí, has leído bien Euro5. Después de adaptarnos a la normativa Euro4, de cara a 2020 debería entrar en vigor la Euro5 aunque seguramente se aplace pues todavía no se han comunicado a las marcas los parámetros que tendrán que cumplir para obtener el certificado correspondiente. Aún así, la firma taiwanesa ha trabajado para reducir casi un 70% los límites actuales lo que implica que no solamente pasa holgadamente la norma actual si no que lo hará sin esfuerzos para la siguiente.

Conseguir superar las normas del futuro pasa por reducir las emisiones y eso se consigue con un menor consumo. En este caso el Like 125 declara 2,8 litros a los 100, algo que en la primera toma de contacto no pudimos corroborar. Hablando de cifras de emisiones puras y duras comparado con los límites actuales, en KYMCO declaran un 34% de CO (monóxido de carbono), las emisiones de hidrocarburos un 33% y las del dichoso NOx (óxido de nitrógeno) un 37% de lo permitido.

En realidad este nuevo motor es la gran baza de KYMCO de cara al futuro y lo más interesante es que estamos hablando de un propulsor refrigerado por aire, por lo que será el que empleen el resto de los nuevos modelos “de aire” en el futuro más cercano. Pero estas nuevas “prestaciones ecológicas” no influyen en las prestaciones mecánicas, puesto que consigue entregar una potencia de 11,6 CV lo que la sitúa en la parte alta de los motores refrigerados por aire. Este motor ha sido concebido partiendo desde el cero absoluto y pensando en las motos taiwanesas que montan llantas pequeñas y llantas grandes pues está diseñado para poder ser usado en scooters que usen desde 12 hasta 16 pulgadas. Otra de sus características y esa sí la pudimos corroborar es que es mucho más silencioso que los motores de aire que habíamos visto en los modelos anteriores. Es decir, más potencia, menos emisiones, menos consumo y menos ruido, un póker de prestaciones.

Después de esta introducción que repasa el lado más técnico, nos subimos por fin al KYMCO Like 125. Como decíamos al principio lo primero que llama la atención es su diseño, con un corte a medio caballo entre lo clásico y lo moderno, unas líneas que evocan pero que no condicionan y que hacen que este modelo no se quede encasillado. Lo cierto es que visualmente estamos ante un 125 de precio medio muy bien acabado, con detalles interesantes aunque con otros que se podrían mejorar pero dentro de una lógica en la que la ecuación calidad-precio es más que interesante.

Entre esos detalles de calidad encontramos la iluminación full led. El KYMCO Like 125 es el primer 125 de la firma asiática con este tipo de iluminación y el segundo de toda la gama tras el deportivo AK 550. No tuvimos oportunidad de probarlo en plena noche, pero tiene muy buena pinta puesto que en las zonas de sombra ya se hacía notar y la visibilidad del resto de scooters en la presentación se veían perfectamente.

En cuanto a la parte ciclo, podemos decir que está bien resuelta, como cabría esperar. Su chasis de doble tubo sumado a su sistema de suspensión con una horquilla telescópica de 32 mm de diámetro y su doble amortiguador trasero ajustable en cinco niveles de precarga son un equipo que trabajan a la perfección. La moto se muestra ágil en todo momento, pero también estable a pesar del pavimento que podamos encontrarnos. De hecho estuvimos probándolo en las calles empedradas de Segovia y su rendimiento estuvo a la altura, demostrando además que también es un scooter cómodo de conducir. Los frenos cumplen sin lugar a duda y su sistema CBS es efectivo, ayudando a parar la moto con contundencia incluso para aquellos menos expertos. Eso sí, aunque su efectividad está fuera de toda duda y es una gran ayuda que hace más fácil su uso, no nos salvarán del bloqueo de la rueda en caso de que apretemos la maneta derecha con contundencia.

Si queremos buscar una conducción más alegre y por tanto fuera de los márgenes lógicos para los que se ha diseñado el KYMCO Like 125 nos encontraremos con un scooter que sigue siendo fácil de conducir y a la vez divertido. Lógicamente no es rápido en términos absolutos, pero su velocidad y aceleración son razonables para un 125 refrigerado por aire que está cumpliendo normas muy restrictivas. Al final, se descubre como una buena herramienta de trabajo para el día a día pero, también, como un scooter que nos permite movernos con estilo por la ciudad y sus aledaños.