Prueba Zontes V310 2019: custom deportiva para carnet A2
Las rivales directas de la Zontes V310 son la Benelli 502C y la Honda CMX500 Rebel

Con sólo dos temporadas en el mercado, Zontes ya dispone de cinco modelos en cuatro segmentos diferentes (naked, sport-turismo, trail y custom) y una proyección de otra docena hasta 2021. Actualmente se centran en los usuarios de carnet A2 hasta 48 CV gracias a su monocilíndrico DOHC 4 válvulas de 312 cc y 35 CV de última generación, pero el futuro a corto plazo es mucho más ambicioso: versiones especiales 310 "Evo 2.0" mejoradas (basculante monobrazo, pantalla TFT, embrague anti-rebote, etc.), gama scooter 125/300 y tricilíndricas entre 500 y 1.000 cc. Sin duda, Zontes no es flor de un día y ha llegado para quedarse. La marca se comercializa en España a través de Turbimot, empresa del experimentado Grupo ONEX, responsable también de FB Mondial, SWM o las eléctricas Super Soco. La Benelli 502C, novedad también este año, es su principal rival.
En SoyMotero.net ya probamos las Zontes R310 y T310, dos modelos que han entrado muy fuerte entre las naked y trail de iniciación. Ahora le llega el turno a la variante custom, una moto que llama la atención por su agresivo diseño y mejora aún más el excelente equipamiento de sus hermanas, ya de por sí muy completo. Las características de la Zontes V310 son únicas en su segmento, básicamente porque la misma marca es la que produce sus propias piezas sin verse obligado a recurrir a otros suministradores externos (excepto para los sistemas de ABS e inyección). Así, se acortan los tiempos, se facilita el trabajo y se abarata el precio final.
El listado incluido de serie es extenso y digno de mención: instrumentación TFT a color, embrague anti-rebote, manetas/estriberas regulables, iluminación full-LED (con faro delantero de aluminio Osram), doble modo de conducción (Eco/Sport), llave de proximidad, batería de litio optimizada, apertura remota de asiento/depósito (14 l.), toma de corriente USB, ABS Bosch 9.1, piñas retroiluminadas, topes anticaída, soporte lateral para pinza antirrobo, respaldo de pasajero, estriberas traseras retráctiles, horquilla invertida, freno de disco delantero de 300 mm con pinza de doble pistón, chasis multitubular de acero con depósito de aceite integrado (lubricación por cárter seco), basculante de aluminio con refuerzos externos, portamatrícula flotante, llantas mecanizadas de 17 pulgadas o neumáticos mixtos radiales firmados por CST son algunas de sus características.
En marcha
Al margen de su afilado diseño, lo primero que llama la atención de la Zontes V310 es su buena accesibilidad para todos los usuarios gracias a una contenida distancia asiento-suelo de sólo 72 cm y un arco de pierna que estrecha la unión del asiento (de una pieza) con el depósito, facilitando todos tus movimientos. Además, sus estriberas adelantadas pueden regularse en tres puntos para adaptarse a todas las estaturas, al igual que las manetas, fácilmente regulables mediante una rueda dentada. El manillar de aluminio, ancho, bajo y plano es ideal para apoyarte a la hora de trazar, sin adoptar una posición forzada ni circular tan incómodo como en otras custom de renombre.

Desde la piña derecha abres el asiento, la tapa de acceso al depósito de gasolina y cambias los modos de conducción, mientras que desde la izquierda navegas por el ordenador de a bordo o seleccionas uno de los cuatro diseños para mostrar la información en la nueva instrumentación TFT (Casual, Race, Street y Simple). Sí es cierto que, dependiendo de cómo incida en ella la luz del sol puede no verse bien ya que no es regulable en inclinación.
En marcha, la ligereza de la V310 es otro de sus puntos fuertes, una moto que se maneja como si fuera una 125 (Zontes declara 175 kg en orden de marcha). Además, la llanta delantera de 17 pulgadas y una parte ciclo muy correcta se traduce en cambios de dirección rápidos, mucha agilidad y altas dosis de diversión. Su casi metro y medio entre ejes (menos que una Benelli 502C, por ejemplo) pueden hacer pensar lo contrario pero esta Zontes se desenvuelve con mucha fluidez. No es fácil rozar con las estriberas y, si lo haces, es que has ido a buscarlo a conciencia. Una respuesta menos seca de la pareja de amortiguadores traseros a la hora de afrontar un tramo rizado sería de agradecer, pero la estabilidad de esta Zontes sorprende para bien. El motor responde enérgicamente en todo momento, si bien agradece jugar con la caja de cambio para aprovechar una buena estirada hasta las 9.000 rpm. La frenada delantera es otro aspecto que ha mejorado mucho respecto a sus hermanas R/X/T con una nueva pinza con mayor mordiente, algo de agradecer y con mejor tacto que antes.
