¿Sabes cuál es la velocidad máxima alcanzada por una moto en competición?
Récords conseguidos en circuitos de velocidad

Hace unos años, tampoco muchos, las más rabiosas 500 volaban en las pistas más rápidas algo por encima de los 300 kilómetros por hora. Hablamos de circuitos como el viejo Hockenheim, Mugello o Suzuka. En el resto no llegaban a esa cifra, aunque se quedaban cerca. Hoy en día las motos más rápidas son las de MotoGP y ya no hay ninguna pista del calendario en la que no alcancen los 300 kilómetros por hora, pues incluso en Jerez se han llegado a marcar los 300,8 km/h de punta por parte de Johann Zarco en 2021.
Esto da una muestra de la evolución tan brutal en la velocidad punta, que viene determinada también por el paso por curva, pero que no deja de poner los pelos de punta. Pues bien, en el viejo Hockenheimring y en 1993 para ser exactos, Shinichi Itoh lograba los 320 km/h con una moto que contaba con inyección en lugar de carburadores. Fue un “invento” que las 500 no tuvieron nunca porque los carburadores eran más eficientes en ese momento, pero que le sirvió para superar las velocidades máximas que entonces eran de entre 305 y 310 km/h.
Pero hoy, como decíamos, esas velocidades nos parece que fuesen hasta despacio. De hecho, incluso aunque sea de manera muy puntual y debido a varios factores, alguna Moto2 ha logrado franquear la barrera de los 300. Fue Nicolo Bulega en 2019 en Mugello, con 300,4 km/h.

Pues bien, es precisamente en esa pista en la que actualmente está establecido el récord de velocidad de MotoGP y, por tanto, de las motos de carreras de velocidad, pero la cifra es mareantemente superior. Jorge Martín logró en el GP de Italia de 2022 conseguir unos escalofriantes 363,6 kilómetros por hora, batiendo en 1,2 kilómetros por hora el récord que compartían Brad Binder y Johann Zarco y que lograron en los GP de Italia y Qatar 2021 respectivamente.
Eso sí, hay que dejar claro que estos récords se refieren a los oficiales por parte de la organización y reflejan el paso por la “trampa de velocidad”, por lo que hay telemetrías que han llegado a superar los 370 kilómetros por hora, aunque lógicamente no se trata de récord oficial como tampoco lo sería en caso de ser conseguido fuera de las sesiones de un Gran Premio. Lo espectacular en este caso es que Martín lo logró en carrera, llegó San Donato, y metió la moto en la curva a 95 kilómetros por hora. Si la velocidad fue impactante, la deceleración tuvo que serlo aún más.