Yamaha se vuelca con la sostenibilidad

Podemos decir que gran parte de la industria de la automoción está cada vez más enfocada a la sostenibilidad, pero dentro de ese enfoque hay algunas empresas que llevan la iniciativa y no son, simplemente, pasajeros de las legislaciones. Este es el caso de Yamaha, que lleva unos años implicada en el desarrollo de sistemas de movilidad sostenible como, por ejemplo, el motor de hidrógeno en el que trabaja o alguno de sus scooters eléctricos, de los que hace no mucho conocimos una gama completa.

Pero la firma de los diapasones cruzados va un paso más lejos y lo hace con una nueva estrategia que ha dado como resultado la Yamaha Motor Sustainability Fund, un nombre que ya deja claro que estamos ante una fundación que trabajará por la sostenibilidad, pero ¿Cómo lo va a hacer?

Pues bien, lo hará a través de un fondo de inversión de 100 millones de dólares que será administrado durante los próximos 15 años, y con el cual financiarán las “start-up” comprometidas con la reducción de emisiones contaminantes. Un punto muy interesante de esta iniciativa es que no se trata solamente de movilidad sostenible, sino que abarca más ámbitos: procesos de fabricación, generación de materiales innovadores, soluciones técnicas…

En resumen, una gran iniciativa privada que busca un beneficio que va más lejos de los habituales en la industria y que, sin lugar a dudas, es una medida que demuestra el compromiso de la marca con la sostenibilidad y la innovación. Eso sí, hay que recordar que esta no es la primera iniciativa de Yamaha en este sentido ya que en 2015, puso en marcha el Yamaha Motor Ventures en Silicon Valley, Estados Unidos y el Yamaha Motor Exploratory Fund en 2018.