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La vuelta a la carretera no se disfruta en la primera curva

Que las ganas de salir no hagan que acabes encerrado en un hoyo
Fotos: SMN
La ansiedad va en aumento. Cuando las puertas se abran algunos saldrán como en los encierros de San Fermín. Pero hay que hacerlo con cabeza porque como en las carreras, hay más curvas que la primera y seguro que no quieres acabar encerrado de nuevo en los toriles, o algo peor.

Puede pasar que como yo seas asocial (que no antisocial) y, por lo tanto, estos días de encierro no dejen de ser parte de tu rutina. Algunos parece que llevábamos tiempo entrenando para ello y todavía no se nos ha empezado a caer la casa sobre la cabeza. También evitamos crear estos años pequeños monstruos incapaces de jugar entre cuatro paredes si no es enchufado a una máquina y, claro, ahora a ver quién le enseña a que uno se puede entretener leyendo, pintando, haciendo manualidades o simplemente jugando en una habitación como hacíamos los nacidos en los 70-80.

Salir en moto para algunos puede ser como una droga. Estoy de acuerdo. Y es que puede crear adicción y dependencia. También está la compañía de los colegas de ruta, parar y tomar algo, contar anécdotas, etc. La solidaridad motera también es otra de nuestras bazas. Ayudar por el simple hecho de hacerlo, no por esperar nada a cambio. Bueno, igual aceptaba una deportiva de los 90 como parte del pago, todos tenemos un precio.

Colegas de ruta

Pero todo esto terminará en algún momento y entonces el día a día volverá a la normalidad. Estoy seguro de que el mundo no será igual ni por asomo. Habrá gente que el palo económico le habrá dejado tocado y otros habrán hecho el agosto en marzo. Habrá gente que habrá pasado el bicho y otros que habrán perdido seres queridos. Pero los más afortunados no notarán un gran cambio en sus vidas y arrancarán de nuevo su rutina.

Ese primer día que haga sol se pondrán sus mejores galas y saldrán a dar una vuelta. Solos, con la pareja, o en grupo. Pero esas ganas no nos pueden cegar. Como dijo Juan Manuel Fangio, uno de los mejores pilotos de Fórmula 1:

Las carreras no se ganan en la primera curva. Muchas veces se pierden

En este caso nuestro exceso de fogosidad puede hacer que perdamos algo más en la primera curva. Después de tanto tiempo sin subirnos a la moto habremos perdido capacidades y nuestro cuerpo debe adaptarse. De igual forma y si no hemos revisado la moto, hay que estar seguros que está en perfecto orden: presiones, suspensiones, frenos, luces, etc.

Al igual que un minero cuando sale de trabajar lo hace con gafas de sol para no exponerse a la luz, pensemos en que este es el primer viaje de muchos y que los puntos los reparten cuando volvemos a aparcar nuestra moto a la vuelta.

Pero mientras tanto, #yomequedoencasa

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