Publicidad

Prueba Larga Duración Yamaha MT-07 2014: coctel fun

Fotos: Javier Ortega
La llegada de la MT-07 a los concesionarios ha sido todo un éxito, siendo la segunda moto de marchas más vendida de nuestro país. La aceptación generada se debe, principalmente, a su nuevo motor CP2, afiladas líneas, cifras declaradas, posibilidad de conducirse con carnet A2 y, por supuesto, a su precio: 5.899 €. Un verdadero cóctel en el que se mezclan diversión y facilidad de pilotaje a partes iguales.

Siempre que nos encontramos ante una moto nueva, como es el caso de esta MT-07, nos surgen mucho interrogantes pues no se trata de un restyling de una moto conocida con algunas mejoras, sino de un nuevo chasis, de un nuevo motor y de una parte de ciclo desconocida hasta este año.

Esta Yamaha ha aterrizado como cuarto escalón de la familia MT, tras las 3 versiones de la MT-09 y por encima de la MT-03 y la 125, que acaba de llegar a los concesionarios. Su estética de naked futurista convive con un concepto estándar más afín a las necesidades reales de los usuarios que demandan una moto de alta cilindrada para el día a día. La posibilidad de limitación para el carnet A2 unido a su contenido precio son una gran noticia para todos aquellos “rookies” que busquen sensaciones de moto grande.

La fábrica de los diapasones ha trabajado en una fórmula de éxito sabiendo poner en práctica el sentido común para aumentar las prestaciones de una moto: si no podemos aumentar la potencia (por la limitación A2), reduciremos el peso del conjunto (164 kg declarados y 179 kg en orden de marcha). A esto le sumamos una distancia entre ejes de 1.400 mm y un chasis que la hace girar con sólo pensarlo. ¿Qué obtenemos? ¡Un juguete tanto para novatos como pilotos más avezados de lo mas divertido!

Sensaciones

Normalmente desde que sabemos cuál será nuestra próxima prueba hasta que llega el día de ir a recoger la moto pueden pasar un par de semanas. Un tiempo que transcurre terriblemente lento cuando se trata de una novedad como esta MT-07…

Por fin llega el día y nos dirigimos al concesionario con la misma ilusión que un niño el día de Reyes. Tras esperar unos minutos se abre la puerta del taller y aparece nuestra protagonista, que nos sorprende por su tamaño, algo más grande de lo que se puede apreciar en fotos. Las estilizadas líneas del colín nos recuerdan a R6 pero su blanco impoluto nos aporta una sensación de tranquilidad, o eso queríamos pensar. Sin mucho más tiempo para presentaciones nos entregan las llaves y comienza la diversión.

A pesar de que calzamos “la estatura media española de los 60” nos montamos y quedamos sorprendidos por lo estrecho que es el depósito y lo bien que llegamos al suelo. Aún agradecidos por esta característica de la MT-07 giramos la llave y, el cuadro de instrumentos (totalmente digital) situado encima de las torretas del manillar, se enciende mostrándonos gran cantidad de información.

Este es el momento en el que revisas que cada cosa esté en su sitio: colocamos los retrovisores, agarramos el manillar que se nos antoja algo estrecho, comprobamos los botones de unas piñas muy sencillas, nos ponemos cómodos y arrancamos. Un sonido muy característico nos evoca recuerdos de aquella Yamaha TRX 850 de finales de los ’90 que tantas satisfacciones nos dio en su época. De hecho, este bicilíndrico en paralelo denominado CP2 comparte la misma tecnología Cross Plane que aquella en lo que a calado de cigüeñal se refiere (270º).

Tras los primeros kilómetros lo que más llama la atención es la increíble agilidad de su chasis. Es como una 125 con un motor muy lleno, que te catapulta de curva a curva desde el “sótano” de su cuentavueltas. Llegamos a casa y no podemos evitar dar una vuelta alrededor de la moto, sorprendidos por lo fácil de conducir que es. Mientras planifico la prueba calculando los próximos itinerarios y kilómetros por carretera de montaña, autopista y ciudad, apagamos la luz del garaje y camino a oscuras hacia la puerta, mientras realizo una doble reflexión: va a ser mi moto de diario las próximas semanas y… ¡me lo voy a pasar genial las próximas semanas!

Ciudad

La MT-07 nos dejó con tantas ganas de más que hemos decidido movernos con ella en el tortuoso tráfico, sin duda, una prueba de fuego para esta “pequeña” MT. Tras algunos semáforos enseguida le coges el hilo a este motor y sólo con oírlo ya sabes cuándo te va a dar ese empujón que tiene a partir de 3.000 rpm. De este modo es muy fácil encontrar el punto para ajustarlo a tus necesidades de conducción: acelerar para adelantar o para pasar antes de que ese autobús te cierre el paso.

El manillar, que en primera instancia nos pareció estrecho, es una auténtica delicia para movernos entre los coches, y realmente se trata de una moto tan ágil que no necesita más brazo de palanca para hacerla cambiar de dirección en el espacio que ocupa un euro.

Hay otro indicador que evidencia que se trata de una moto práctica para moverse dentro de una gran ciudad: todos los sitios para dejarla aparcada te parecen buenos. Cuando llevas una moto muy grande o pesada hay lugares que descartas por lo difícil que será salir de ese hueco entre dos coches o tal vez ese bordillo que parece demasiado alto para tu scooter: la MT-07 es una “todoterreno del estacionamiento urbanita”.

Autopista

Esta MT-07 no es la moto que nos iríamos a probar a una autopista, entre otras cosas por su naturaleza de naked y nula protección aerodinámica. Sin embargo, antes de llegar a nuestro tramo de carretera de montaña favorita aprovechamos para dar un buen rodeo y así comprobar qué tal se desenvuelve esta pequeñaja entre las largas rectas de una de las vías de escape de Madrid.

En los primeros kilómetros el tráfico es denso y circulamos jugando con el cambio entre cuarta y quinta para comprobar su potencia a medio régimen. Aunque este motor sube hasta mas de 10.000 revoluciones, aprovechamos la patada en medios (de 3.000 a 7.000 rpm) para cambiar al carril izquierdo como un relámpago y llegar ipso facto a ese hueco que había 20 metros más adelante.

Por fin el tráfico empieza a ser más fluido y podemos empezar a jugar más con las recuperaciones en sexta. Otra vez volvemos a agradecer el estrecho manillar (que equivocados estábamos cuando nos pareció inapropiado) que nos permite fundirnos con el estilizado depósito, en el cual también hay hueco para esconder las rodillas. Sólo echo en falta una pequeña cúpula detrás de la que protegerme cual piloto de Moto3 en plena recta.

Si circulamos a alta velocidad (nos sorprendió hasta dónde dan de sí sus 75 CV) la Yamaha te cuenta que precisamente este no es el uso para el que ha sido concebida en autopista. Sólo en estos casos la moto se vuelve muy nerviosa de dirección y en las curvas largas flanea en exceso con un serpenteo que recorre la moto como consecuencia directa de su corta distancia entre ejes. Sin embargo, no es nada que deba preocuparte, ya que esta moto no se diseñó para devorar autopistas sin fin.

Curveando

Tras casi 100 km por autopista tomamos la salida que nos lleva a nuestro tramo de curvas talismán, ese en el que llevamos pensando toda la semana y en el que sabemos que la MT-07 se sentirá como pez en el agua. Nada más lejos de la realidad. llegamos a las primeras curvas rápidas enlazadas y nos sorprende tanto la agilidad del chasis que menos mal que la primera curva es a derechas por que la hemos trazado mucho más hacia dentro de lo normal sin querer.

Después del susto inicial nos vamos haciendo a la idea de que a esta moto no hay que ordenarla que gire, ¡basta con insinuárselo! Estiramos el motor hasta donde nos permite la moto y es que en ocasiones es casi más divertido pilotar una moto con un motor pequeño que una más potente porque te permite ir jugando con el cambio.

Una vez llegamos a la parte revirada de esta carretera de montaña, y tras unas cuantas curvas realmente cerradas, sale a reducir el buen hacer de los frenos, que cuentan con una pegada suficiente para detener con seguridad esta MT-07. Es importante tener en cuenta que es necesaria una pequeña fase de adaptación a la retención del motor entre 4ª-3ª y 3ª-2ª ya que en los primeros lances te parecerá demasiado, reduciendo en exceso la velocidad de aproximación a la curva. Pero como ya os contábamos, una vez que lo integras a las características de pilotaje de esta moto, se puede convertir en un aliado en lo que a diversión se refiere. Además, es curioso el diseño del chasis que permite tumbar sin que llegues a rozar ni con los estribos ni con ninguna otra parte de la moto. Está claro que esta bicilíndrica japonesa está hecha para inclinar.

Valoración final

Hace años existía un adjetivo muy extendido para denominar a esas primeras “motos gordas” muy fáciles de llevar con las que podías aprender con grandes márgenes de seguridad: FUN. De igual manera que nuestra protagonista, contaban con una parte de ciclo que hacía todo muy fácil y que estaba por encima de las prestaciones mecánicas, es decir: un chasis noble, un buen equipo de frenos y neumáticos de secciones decentes.

Con esta MT-07 Yamaha ha resucitado esa vieja fórmula, añadiendo ahora un poco de picante en forma de diversión, y envolviéndolo todo en unas líneas de naked futurista de lo más atractivas.

En resumen, si lo que buscas es una moto fácil de conducir, con una estética impactante, a buen precio (5.899 € estándar, 6.599 € con ABS) y capaz de sacarte una sonrisa cuando enrosques su puño derecho, no dejes de darte una vuelta por el lado oscuro de Yamaha.

Lo mejor:

  • Precio
  • Facilidad de conducción
  • Ligereza

Mejoraríamos:

  • Suspensiones blandas
  • Espacio asiento pasajero
  • Conjunto de piñas y luces muy básico

Lo último

Lo más leido

Soymotero TV

Últimas motos

MITT 808 2024

MITT 808 2024

A2 | 8.295 € | 213 kg | 56 CV
MV Agusta Enduro Veloce 2024

MV Agusta Enduro Veloce 2024

A | N.D € | 224 Kg | 124 CV
CFMoto 450 CL-C 2024

CFMoto 450 CL-C 2024

A2 | 6.269 € | 181 | 40 CV