YUGO: motosharing con scooters eléctricos retro

Las últimas tendencias en lo que a movilidad urbana se refiere están cambiando la manera de desplazarnos por la ciudad. Bike-sharing, modern renting, P2P o free floating son denominaciones que cada vez suenan más fuertes. En lo que a coches se refiere tenemos el ejemplo de Car2Go, con una flota de Smarts eléctricos que ha tenido una excelente acogida.

Aplicando esa misma filosofía, hace un año cuatro jóvenes emprendedores franceses pusieron en marcha el proyecto YUGO en Barcelona, enfocado al libre desplazamiento en scooter eléctrico con el propio usuario como conductor: si no te gusta que te lleven es una buena opción (este año Cooltra también ha apostado por este formato). Está concebido, principalmente, para trayectos cortos (15 minutos de media) y su comunidad de usuarios ya ha crecido hasta los 800 miembros en parte porque tienen convalidación de ciclomotor o moto de 125, dependiendo del modelo, lo que permite que lo puedan usar también usuarios con permiso de circulación de coche.

Desde la propia web de Get YUGO te das de alta como nuevo usuario (29,90 €) adjuntando tus documentos personales, acreditando que tienes carnet B y añadiendo número de cuenta. Una vez registrado y validado, inicias la sesión desde tu teléfono móvil y a funcionar. Desde la aplicación de YUGO controlas todo (desbloqueo/bloqueo de la moto, mapa de scooters cercanos disponibles, etc) y la reserva de ese scooter concreto es gratuita durante los primeros 15 minutos. El coste de utilización es de 0,10 € el minuto y todos disponen de seguro a terceros con AXA.

La imagen de estos scooter recuerda al de las Vespa/Lambrettas de toda la vida (cada una está valorada en 4.000 €, incluyen baúl trasero con dos cascos jet (y sus correspondientes gorros higiénicos desechables) y no tienes que preocuparte de la batería pues siempre están operativas. Los propios miembros de la empresa se encargan de recargar las dos unidades extraíbles que tiene cada scooter regularmente para alcanzar una autonomía máxima de 60 km, que puede variar según el uso (si está baja de batería la APP te indica que no se puede reservar). Una vez finalizado el trayecto debe aparcarse correctamente para evitar que la grúa se lleve el scooter eléctrico, algo que de suceder acarrearía el consiguiente cargo para el usuario.