MV Agusta había visto que intentar vender muchas motos estuvo a punto de acabar con ella. La solución pasaba por volver a sus orígenes, es decir, vender motos exclusivas de elevado precio que dejan un margen de beneficio mucho más amplio al haber mucha menos competencia. La prueba queda patente en sus últimas ediciones limitada, la MV Agusta Brutale Serie Oro y la MV Agusta Superveloce Serie Oro que agotaron sus tiradas de 300 unidades en pocos días.
Con una cartera llena de pedidos que augura capital, dos fondos financieros detrás que disipan las dudas (Black Ocean Group y ComStar Invest) el siguiente paso ha sido llegar a un acuerdo con Loncin Motor Co. Ltd. que nos recuerda, en cierta medida, al que han llegado también recientemente Norton y Zongshen. Sí, y también otras marcas como KTM y Bajaj, Triumph y Bajaj, BMW y TVS Motor (acuerdos con la industria india) o Harley-Davidson con Benelli-Qianjiang.
Aunque hablamos de Loncin, lo cierto es que los modelos se lanzarán bajo otra de las marcas pertenecientes al conglomerado chino, en concreto Voge. Será bajo este paraguas donde desarrollarán motos de entre 350 y 500 cc con acabados premium y, por lo tanto, más caras (en la línea de los deseos de MV Agusta).
La fábrica italiana junto al CRC (Castiglioni Research Center) serán los encargados de desarrollar el diseño y la ingeniería, quedando en manos de Loncin la fabricación de estos productos en sus líneas de montaje. De esta forma la firma de Varese garantiza que las motos seguirán contando con el ADN italiano en cuanto al diseño, manejo, etc.
Según reza el comunicado emitido por MV Agusta, los primeros modelos empezarán a llegar al mercado en 2021. De momento no se ha confirmado si sólo serán para consumo Chino o también llegarán a Europa.
